Manrique más que un aniversario
Por Antonio Coll
Frente a la profunda hostilidad existente entre el presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés (CC) y la FCM, poco o nada se puede hacer. Es como pedirle a varios náufragos, un debate para salvarse, en medio de una gran tormenta. Yo, en esta entrega, no pretendo demostrar nada, quizás solo exponer que la “sin razón” permanecerá vigente en la celebración del centenario del nacimiento de César Manrique. Por un lado, el Cabildo de Lanzarote continuará con los actos programados y el ente fundacional, por otro lado, con los eventos previstos.
La obra de Manrique, en la isla de Lanzarote, solo se puede justificar, gracias a la financiación del Cabildo. Los Centros Turísticos encierran la parte más importante y la implantación de los siete centros se realizó con dinero público. Es la mínima razón de la legitimidad del gobierno insular para tributar un homenaje al artista para conmemorar el aniversario. Que los postulados de la cúpula de la Fundación CM no coincida con la proyección de la primera institución de la isla y, además, cuestione que abandere la celebración, debe de entenderse solamente como una posición particular de un ente cultural privado que nació para divulgar, conservar y proteger la obra de Manrique, su trabajo multidisciplinar y el binomio Hombre-Naturaleza que en vida, Manrique puso más énfasis, así como enriquecer la visión futurista del universal artista, hoy Reserva de la Biosfera y GeoParque, nombramientos otorgados por la UNESCO.
La opinión generalizada que percibo, de muchos ciudadanos, es que todo se ha politizado, cuando la lógica hubiese sido que tanto el Cabildo y la propia FCM fueran protagonistas en dirigir, conjuntamente, todos los actos hasta su culminación, el 24 de abril. Pero ya no es utópico, sino imposible. Y sé porqué lo afirmo. El PSOE dice que “es un fracaso político” y argumenta que Pedro San Ginés “tenía que haber cedido ante la FCM” sus peticiones. Sinceramente, desconozco las negociaciones preliminares entre ambas instituciones. Los argumentos de réditos electorales, bajo mi óptica, no los puedo compartir y no quiero perder el tiempo con esta sinfonía intrascendente por ser hueca y “partidista”. En el fondo, todo está disfrazado y el centenario oficial de Manrique se celebra dividido, pero el reconocimiento del pueblo lanzaroteño y canario será el símbolo que prevalezca. Como el poema de Rafael Alberti: “A César Manrique, pastor de vientos y volcanes…”.
Para terminar, solo decir que el Cabildo de Lanzarote está totalmente legitimado para organizar y celebrar, públicamente, el centenario del artista lanzaroteño. Todo lo demás es estrechez de miras y sectarismo. Porque César Manrique es patrimonio cultural del pueblo lanzaroteño y canario. También la FCM está en su derecho a cortar amarras y elegir libremente los actos del centenario de Manrique.
Lo importante es que el tesoro de Manrique prevalecerá más allá de la polémica suscitada que solo, en parte, envilecen y enervan, torpemente, un gran acontecimiento y homenaje.