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Una base permanente de hidroaviones en Canarias

Rosa Dávila  la pide y señala que la justificación que se dio por el Gobierno de España de que otras zonas quedarían desatendidas, "ya no se sostiene"

 

  • Lancelot Digital
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    El Cabildo de Tenerife ha llevado a cabo una evaluación preliminar de los estragos ocasionados por el incendio forestal que ha asolado la isla desde el pasado 15 de agosto. A pesar de que actualmente el incendio ha sido contenido después de devorar cerca de 15.000 hectáreas en un área de 90 kilómetros que abarca 12 municipios, los daños calculados alcanzan la suma de 80,4 millones de euros. Rosa Dávila, presidente de la Corporación insular, ha pedido una base de hidroaviones en Canarias de manera permanente como medida ante este tipo de siniestros, tal y como publica Diario de Avisos.

     

    La presidenta de la isla, Rosa Dávila, hizo hincapié en este asunto el jueves, destacando que es muy probable que el Consejo de Ministros declare a Tenerife como una “zona catastrófica” posiblemente el viernes. Ella detalló: “Los daños estimados, incluyendo las infraestructuras del Cabildo y los impactos en la regeneración de áreas como el Parque Nacional del Teide, se sitúan en alrededor de 80,4 millones de euros”. Además, subrayó que uno de los sectores más perjudicados por el incendio es el sector primario.

     

    El incendio ha dejado su huella destructiva en la isla, y la cifra multimillonaria de los daños refuerza la necesidad de una respuesta rápida y solidaria para ayudar a Tenerife a recuperarse de esta crisis ambiental y económica.

     

    Dávila expuso que este incendio permite hacer una reflexión, “y es la necesidad de que Canarias tenga una base permanente de hidroaviones”.

     

    “Después de tres años sufriendo incendios terribles para toda Canarias y después del incendio que ha sufrido la isla de Tenerife, creo que ya no se cuestiona que Canarias necesita una base permanente de hidroaviones”.

     

    Para la presidenta, la justificación que se dio en su momento en el 2020 por el Gobierno de España de que otras zonas quedarían desatendidas, “ya no se sostiene después de haber vivido este terrible incendio que ha dejado devastada Tenerife con un daño ya no sólo económico sino ambiental sin precedentes”.

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