CC gana el primer set al PSOE
Lleva el Partido Socialista de Lanzarote un tiempo largo intentando echar por tierra cualquier cosa que haga el gobierno del Cabildo, muchas veces más desde el rencor que del lógico papel crítico de la oposición. Y se nota, el odio. Un ejemplo es la batalla perdida en su guerra contra los nacionalistas por conseguir el amor del tercer sector, de esas ONGs, que en la época de Dolores Corujo, cuanto menos, se sintieron desprotegidas y no escuchadas. Se define Tercer Sector como aquel formado por organizaciones privadas, sin ánimo de lucro, nacidas de la iniciativa ciudadana o por el interés de empresas que trabajan contra la pobreza y la exclusión social. En la isla contamos con Adislan, AFA o El Cribo, entre otras muchas, y cuentan con un amplio respaldo de la población local por su gran labor realizada en los últimos 30 años en la isla.
Llama la atención el comunicado emitido por el PSOE en contra de la firma de la Paz social con este tercer sector que logró recientemente el presidente del Cabildo, Oswaldo Betancort. Tras cuatro años de encontronazos y enfrentamientos con la expresidenta de la Primera Institución, Dolores Corujo, que, según los afectados, ni los recibía, se ha llegado a una etapa de calma.
Cierto es que habrá que ver "el andar de la perrita" y cómo evolucionan las cosas tras este primer paso en positivo logrado por nacionalistas y populares. Pero también es cierto, que el PSOE en cuatro años no logró ganarse a este tercer sector. Corujo encontró una situación de cierta precariedad en los contratos que trató de resolver por lo sano, imbuida por cierto resquemor contra esas organizaciones, que consideraba más cercanas a CC que al propio PSOE. No quiso aprovechar la Ley de Concierto Social que aprobó su propio partido en el Gobierno de Canarias, que le hubiera servido para regularizar la situación en Lanzarote y ganarse a unas organizaciones que lo estaban pasando mal.
No le interesó. Más bien dio a entender, sin decirlo, que estas asociaciones no profesionales no eran las más adecuadas para este trabajo y que había empresas que harían mejor esta labor. Eso fue al menos lo que se interpretó por parte de la población y de las propias empresas afectadas.
Coalición Canaria le ha ganado la partida al PSOE entre esos colectivos sociales y eso han enfadado aún más a los socialistas. No soportan que la medalla de la paz social se la haya puesto Oswaldo Betancort y no Dolores Corujo, defensora de todas causas perdidas en el mundo del imaginario de la izquierda. De ahí que CC haya calificado con razón sus reacciones contra ese acuerdo social del Cabildo con las ONGs, de claro pataleo.
Insistimos CC ha dado un primer paso en la buena dirección y habrá que seguir de cerca cómo avanza y evoluciona esta cuestión. A los socialistas les toca hacer examen de conciencia y llevar a cabo un acto de contrición que les reconcilie con esta cuestión y les permita dejar avanzar las cosas que son positivas para la isla. Un error lo puede cometer cualquiera, Dolores Corujo lo cometió.
