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Nueva Canarias y el mito de Ícaro

 

  • Lancelot Digital
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    Le ha pasado a Podemos lo que le puede llegar a pasar a Nueva Canarias que, de tanto aproximarse al PSOE, se ha acabado por no diferenciar de él. Eso es lo que le ha ocurrido a la formación morada que, tras cuatro años gobernando mano a mano con el partido socialista, ha hecho que sus votantes se sientan traicionados por no diferenciar las políticas de ambos. Justo debido a esto han optado por votar a la marca original en lugar de a la marca blanca.

     

    En esa misma cuerda floja parece encontrarse Nueva Canarias que comenzó como una escisión de Coalición Canaria consiguiendo convencer a muchos nacionalistas, especialmente después de conseguir el 75% de descuento en los vuelos para los canarios con el gobierno de Mariano Rajoy. Se convirtieron en un partido nacionalista con voz propia que defendía los intereses de Canarias en Madrid. El problema, una vez más, es que se han escorado mucho a la izquierda, tanto, tanto, que el votante ha acabado por no diferenciarlos del PSOE. Las urnas lo han dejado claro, después de gobernar durante cuatro años no han mejorado sus resultados, es más al no sacar un diputado por la circunscripción regional han perdido la voz identificativa de Román Rodríguez que se ha quedado fuera. Es evidente que la pérdida de identidad se ha traducido directamente en una perdida de votos y de apoyo de los canarios.

     

    De hecho, su decisión de apoyarse en los postulados de la izquierda es lo que ha impedido que se llegue a acuerdos con Coalición Canaria de cara a las elecciones del 23J, marcando líneas rojas de cara a la derecha. CC ha dejado claro en todo momento que la prioridad siempre será Canarias, y que no existen líneas rojas si el objetivo es lograr mejorar para las islas. Nueva Canarias, no.

     

    El mejor ejemplo lo tentemos en la propia isla en el caso de Teguise, donde se daba por cerrado un pacto entre CC-PP y NC, pero la directiva del partido ha dejado clara su prioridad por pactar con la izquierda y han preferido quemar a su candidato un Fernando Jiménez que llegó con su propuesta a muchos teguiseños. Jiménez no tendrá su cuota de poder en Teguise porque sus ‘jefes’ no lo han querido y han preferido quedarse fuera del gobierno.

     

    Es preciso que Nueva Canarias reflexione sobre lo ocurrido en las islas y que defina su marco ideológico para diferenciarse del de sus mentores porque corre el serio peligro de acabar desapareciendo. Tenemos una larga lista de formaciones que han acabado por ser fagocitadas por aquellas de las que se pretendían diferenciar: UPYD, Ciudadanos, ahora Podemos… y otras muchas que vinieron a cambiar las cosas y, finalmente, fueron ellos los únicos que cambiaron. Es lo que tiene acercarse mucho al sol, que como le pasó a Icaro se le pueden acabar quemando las alas… y eso nunca acaba bien.  

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