Carmelo Alemán: “Le he visto las orejas al lobo y he abrazado a la muerte”

El último paciente que abandonó el Molina Orosa tras haber estado ingresado por Covid-19 narra su experiencia

Muy emotiva fue la salida de Carmelo Alemán, superviviente del coronavirus, del Hospital Doctor José Molina Orosa, entre aplausos y exclamaciones de ánimo.

Carmelo ha pasado en el centro hospitalario un total de 61 días en el centro sanitario, 36 en la UCI y 25 en planta.

Él cree que se pudo haber contagiado en el aeropuerto dónde trabaja como Guardia Civil. “Yo creo que fue en el trabajo, trabajo en llegadas en el aeropuerto, controlamos personas que vienen de terceros países y por esa época venían muchos vuelos italianos”, señala.

Al principio apenas tenía síntomas hasta que un día Carmelo no podía ni respirar.

“Un día empecé a notar que no me entraba aire. Yo pensaba que era una neumonía, pero luego me di cuenta de que era otra cosa”, señala

Este agente de la benemérita asegura que no llegó a creer que podía perder la vida. “No llegue a creer que fuera a morir, fue después cuando me he dado cuenta que le he visto las orejas al lobo, he estado abrazado a la muerte y sin enterarme”, afirma.

Carmelo se encuentra bien, aunque tantos días de inactividad le han pasado factura.

“Estoy feliz, con los míos, muy cansando, eso sí, pero me han dicho que en dos o tres semanas estaré mejor”.

En todo momento, Alemán ha querido mostrar su agradecimiento a todos los trabajadores del Molina Orosa.

“Les estaré eternamente agradecido, las niñas de la UCI son mis niñas, ellas me dieron esa vida extra… me han tratado muy bien”, asegura.

Carmelo es una persona muy querida, no sólo entre sus compañeros de la Guardia Civil, que ayer le ofrecían una calurosa bienvenida, también en ambientes baloncestísticos de la isla, donde ha entrenado a equipos como el Maramajo o el Magec Tías.