El Cabildo hace pública la sentencia que ratifica la legalidad de la adjudicación del agua a Canal
Pedro San Ginés considera que el fallo "refuerza la necesaria incautación de la desaladora de Montaña Roja".
Lancelot Digital
Ya se anunció durante el Debate sobre el Estado de la Isla, pero este lunes se ha hecho publica la sentencia que ratifica la legalidad de la adjudicación del ciclo integral del agua a Canal Gestión.
El presidente del Cabildo y del Consorcio del Agua de Lanzarote, Pedro San Ginés, ha informado a través de un comunicado que el Juzgado de lo Contencioso número 3 de Las Palmas de Gran Canaria ha rechazado el recurso de la empresa Club Lanzarote, contra el acuerdo del Consorcio Insular de Aguas, en relación a la adjudicación del contrato para los servicios de abastecimiento de agua, saneamiento y reutilización que hay a favor de Canal Gestión Lanzarote. A juicio de San Ginés, "al ratificar la legalidad de esta adjudicación refuerza la necesaria incautación de la desaladora de la Urbanización Montaña Roja".
El juzgado estima que “una clara falta de legitimación”, porque cuando se realizó la adjudicación del ciclo del agua a la empresa Canal Gestión en junio 2013, Club Lanzarote “no presentó propuesta en ninguno de los dos procedimientos, ni en el abierto, ni en el negociado con publicidad, ni impugnó los pliegos de condiciones particulares, ni el de prescripciones técnicas, ni hizo la más mínima consulta durante todo el tiempo que duró el proceso de contratación y adjudicación. En definitiva fue un extraño al proceso de contratación”. La denuncia la realizó Club Lanzarote después que el Consorcio del Agua incautara la desaladora de Montaña Roja. Por ello el Juzgado rechaza anular la adjudicación del Consorcio a Canal Gestión Lanzarote.
Desde el Cabildo recuerdan que el Consorcio del Agua en Lanzarote incautó está desaladora "porque carece de los permisos para desalar agua". "Tampoco tiene permiso para vender el agua a terceros y por tanto ejerce una actividad ilegal, además de atender la demanda de los vecinos de la urbanización, unas seis mil personas, que se quejaban reiteradamente del mal servicio y la mala calidad del agua", concluyen desde la institución.
