"Los barracones de La Palma han pasado de provisionales a ser vivienda definitiva"
Los vecinos de la isla bonita le piden al Gobierno de España que se tome en serio la recuperación de la zona
“Estamos un poco desamparados”. Así se muestra Francisco Garlaz, un biólogo que habla de cómo se siente en La Palma tras algo más de dos años después de la erupción del volcán de Tajogaite, más conocido como el de Cumbre Vieja, una situación que sigue siendo precaria en cuanto a las ayudas a las familias y agricultores perjudicados. “El problema es que el volcán nos dio un colpe, pero el daño está viniendo de la gestión”, señala. “No hay celeridad, puede ser que haya llegado parte del dinero que se prometió, pero hacen falta auditorias, una correcta gestión y distribución de esas ayudas”.
Como se puede ver en estas imágenes los barracones continúan 25 meses después de la erupción y de ser algo provisional ya se insinúa que serán definitivos. “No hay un plan de ruta. Los barracones eran provisionales y se están convirtiendo en indefinidos y no están acondicionados, hace mucho calor en verano y mucho frío en invierno. No solo eso, hay gente que sigue viviendo en hoteles o en casas de familiares. Son dos años ya así”.
La población de La Palma propone al Estado que se tome en serio la recuperación de la zona.
Hay que destacar que desde el gobierno de Pedro Sánchez se anunciaron ayudas millonarias que dos años después no acaban de llegar.