Machín evalúa con los vecinos de La Santa el impacto de la llegada de inmigrantes
Piden una vigilancia policial constante y que no se eternice su estancia, aunque afirman que muchos ya están tratando de ayudar para que estén lo mejor posible en el albergue
Los vecinos de La Santa mostraron este martes al alcalde de Tinajo, Jesús Machín, la preocupación que tienen en torno al cobijo en el albergue de La Santa de más de cien inmigrantes que dicen que transitan libremente por el pueblo, en algunos casos, según aseguran los propios vecinos, pidiéndoles dinero e incomodándoles.
Los Vecinos que agradecieron al alcalde el encuentro consideran que debe garantizarse la vigilancia de Policía Autonómica durante el tiempo que los inmigrantes estén allí.
Además pidieron que no se eternice ese alojamiento porque se les explicó que la emergencia humanitaria se ha activado por tres meses que pueden ser prorrogables a otros tres.
Machín recordó que sus competencias como alcalde en este tema son muy limitadas, pero se comprometió a seguir presionando para que los cuarteles de Arrecife sean cedidos por el Gobierno central.
La reunión también transcurrió en un tono más propositivo con algunas sugerencias que faciliten la integración de los menores.
De igual modo hubo vecinos que se prestaron a realizar actividades de entretenimiento para sobrellevar mejor su estancia en el albergue y el alcalde aseguro que están preocupándose por el bienestar de los jóvenes. "No tenían televisión, porque no funcionaba, le mandamos a la gente del Ayuntamiento para arreglar la antena, les vamos a instalar dos canastas de baloncesto porque tienen que entretenerse".
Así las cosas, el pueblo de La Santa espera ahora una reunión que a finales de mes mantendrán Clavijo y Sánchez para comprobar el grado de implicación que el Estado tiene con la llegada de pateras a la isla.
Por otro lado, Machín consideró en Café de Periodistas que el mal funcionamiento del Sive es sólo la punta del iceberg, ya que plantea que no solo no hay prevención en la detección de las pateras, sino que tampoco hay patrulleras por mar con sede en Lanzarote, lo que ralentiza la respuesta de las autoridades cuando se producen los avistamientos.
