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¿Por qué se anula la grabación de Espino que originó el caso Unión?

Fiscalía recurrirá el auto del juez Salvador Alba

 

  • Lancelot Digital

  • El juez Alba hace suyos los argumentos de la defensa de Luis Lleó para anular la grabación que originó el caso Unión, la cual no contó con autorización judicial. El magistrado considera acreditado que la grabación hecha el 5 de junio de 2008 por Carlos Espino a Fernando Becerra, no sólo no fue autorizada, sino que se llevó a cabo "de forma preordenada a la obtención de un delito", de forma subrepticia, es decir, oculta, y teledirigida por la Guardia Civil. Además, según concluye en el auto, la grabación "se sabe manipulada por la existencia de cortes que evidencia una edición, como queda acreditado por los informes periciales de parte de y de la propia Policía Científica".

     

    Según se recoge en el auto, la grabación no se realizó de forma ocasional, sino para recoger la comisión de un presunto delito, sin autorización. "Es decir, los agentes de la Guardia Civil utilizan a Carlos Espino para obtener una grabación para incorporarla a un atestado sin comunicar nada al Juzgado de guardia pues, sin duda, se iba a quebrantar el derecho a la intimidad de dos personas", expone el magistrado. 

     

    Alba también manifiesta que llama también la atención sobre que el origen de todo el procedimiento se encuentre en una "comparecencia" de Carlos Espino pues, "cuando se realiza la grabación subrepticia, no solo no existía una investigación judicial de supuestos hechos delictivos, sino que ni siquiera existía una investigación policial". "No acude Carlos Espino a dependencias de la Guardia Civil, sino que es la Guardia Civil la que, por alguna razón, acude al despacho profesional de Carlos Espino para que éste haga una comparecencia en la que relata lo sucedido un mes antes con Fernando Becerra, un intento de soborno, y manifiesta a los agentes que necesita algún dispositivo para grabar una conversación que iba a tener lugar al día siguiente, precisamente", añade.

     

    Así, apunta, "sin más indicio que la manifestación de Carlos Espino, y sin ni siquiera comunicar a la autoridad judicial en funciones de guardia, al menos, la comparecencia efectuada por Carlos Espino en la que relataba hechos de tanta gravedad, decide la Guardia Civil entregar al señor Espino una grabadora oculta para grabar una conversación con Fernando Becerra , pero a los solos efectos de captar la comisión de un presunto delito".

     

    En base a estos argumentos es por lo que el juez Salvador Alba anula dicha grabación, así como las posteriores realizadas en julio, noviembre y diciembre de ese año, que también documentaban presuntamente reuniones entre Fernando Becerra y Carlos Espino. "La nulidad de ese documento a los efectos procesales y constitucionales conlleva la del resto de grabaciones pues, sin duda, se había generado una expectativa de privacidad en la persona grabada cuyo quebranto es condenado, como hemos dicho, por nuestro Tribunal Europeo de Derechos Humanos y nuestro Tribunal Constitucional", recoge el magistrado en su auto.

     

    En cuanto a las intervenciones telefónicas, sobre las que también la defensa de Luis Lleó pidió su nulidad, recordar que Alba ha acordado que este asunto se resuelva mediante una prueba pericial antes del juicio oral, consistente en que especialistas del departamento de ingeniería de la Guardia Civil, y en los términos interesados por el Ministerio Fiscal, se proceda a la verificación de la integridad de los contenidos volcados a los soportes CD/DVD entregados en el juzgado, mediante su contraste con los que quedan registrados en el Servidor Central del SITEL a disposición de la autoridad judicial.

     

    Fiscalía recurrirá el auto

     

    Contra el auto dictado por Salvador Alba cabe recurso. De hecho, según informa Canarias 7, que adelantó en primicia la noticia, Fiscalía ya ha anunciado que recurrirá la decisión del juez Salvador Alba de anular la grabación que inició el caso Unión. 

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