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Las prospecciones, un asunto a resolver

Por Antonio Coll

 

 

La manifestación, dirigida por  plataformas “ecologistas”, con el apoyo de determinadas instituciones públicas, para posicionarse, una vez más, en contra de los inminentes sondeos de Repsol, para averiguar la existencia de  hidrocarburos, frente a  las costas de Lanzarote y Fuerteventura, se celebró con más pena que gloria, al disminuir, considerablemente, la concurrencia a la desarrollada en la anterior convocatoria. 

 

Entre los eslóganes empleados, destacamos: “Somos mayoría. No pasarán, ni Repsol ni mentiras. No vamos a callar”.  “Ellos tienen los medios para engañar. Y ellos tienen el poder…pero nosotros tenemos. La razón”.  También se expuso  sobre  los peligros para la desalación de agua,  medio ambiente, pesca, turismo y otras retahílas, para concienciar a la población de los perjuicios de las prospecciones petrolíferas.

 

La libertad a manifestarse es un derecho intrínseco en una democracia y,  en este punto, poco o nada puedo opinar.  Criticable es si, como dice el PP, se usa recursos públicos, como los bonos gratuitos para utilizar el transporte público  para trasladar a los potenciales manifestantes de municipios, ubicados fuera de Arrecife.

 

Si bien, considerando la  medida  injustificada, el fondo de la cuestión  radica en la estrategia del Gobierno de Canarias y los Cabildos de Lanzarote y Fuerteventura, en su obsesiva actitud de oponerse a los sondeos, con argumentos confusos y algunos con escasa base racional que lo sostenga. Porque, en vez de haber llevado una comunicación y negociación positiva con el Gobierno Español y la propia compañía Repsol, han optado por recorrer, no solo,  el camino más largo,  sino el que no llega a ninguna parte. Porque ampararse en la ambigua argumentación de que los sondeos constituye una gran amenaza medioambiental,  que tendría un impacto negativo en la industria turística, es muy opinable. Hay ejemplo de todo lo contrario.  Según todos los expertos, la probabilidad de algún incidente, que no tiene que ser grave,  se sitúa en el 0,005% como máximo y existen países eminentemente turísticos que conviven con la industria turística.

 

Tampoco vale las tesis de que en caso de incidente, las potabilizadoras puedan verse afectada. Un inminente geólogo y geofísico, Antonio Afonso, experto en exploraciones en todo el mundo, deshace la teoría de los detractores del oro negro, ya que las desaladoras recogen el agua de pozos del mar, imposible que pueda contaminarse ya que “siempre el crudo va a flotar en la superficie”. Es el principio de Arquímedes. 

 

                   Marruecos encuentra petróleo a 200 km de Lanzarote

 

Por otro lado, las autorizaciones del Reino de Marruecos a  seis sondeos, uno de ellos a la altura de Sidi ifni, a unos 200 km  de Lanzarote, ha resultado positivo. Según informa este mismo diario digital, los trabajos de exploración, cerca de la antigua colonia española, Sidi Ifni, han demostrado la presencia de hidrocarburos a 2.825 metros de profundidad. Ahora, solo se está a la espera para comprobar la calidad del crudo. Según fuentes consultadas, el hallazgo de petróleo se encuentra en cuencas sedimentarias, muy similares a la zona donde Repsol acometerá los sondeos en noviembre.

 

Yo respeto a los que están convencidos de que el “crudo” es una amenaza y defienden otras alternativas energéticas más limpia. Pero la “cruda” realidad se impone y  no podemos despreciar, actualmente, todo el posible potencial petrolífero y gasístico que pueda hallarse frente a Lanzarote y Fuerteventura. Además, por ahora, se trata de unos simples sondeos para evaluar la existencia o no de hidrocarburos. Cuando llegue el día de su explotación, por su viabilidad, habrá tiempo de abrir un debate, en profundidad, para que Canarias se asegure un importante beneficio de la “tarta” económica, hoy ya calculado en un 8%, según el Ministro de Industria y Energía.  La estrategia de la clase política canaria tiene que ir por esta línea. Por lo demás, la explotación de  hidrocarburos y la industria turística,  pueden convivir perfectamente, como ocurre en muchos lugares del mundo. Se puede ser una gran amante de la naturaleza y el medio ambiente sostenible, pero el bienestar del hombre, está íntimamente ligado  al petróleo y gas. Es calidad de vida. Si queremos mejor sanidad, más educación, infraestructuras públicas, etc., necesitamos generar riqueza. Las condiciones de vida de hoy no tienen nada que ver con nuestros antepasados. El progreso hoy es indiscutible. Hace apenas unos ciento cincuenta años, la esperanza de vida se cifraba en unos 35 años. Hoy supera los 84 años. ¿Algo tendrá que ver el sistema económico para esta inmensa mejoría? En determinadas épocas pueden aparecer recesión o deceleración económica, pero estas “crisis” siempre son superadas con nuevas reformulaciones o nuevos encajes, en el actual sistema económico.  Porque está claro que la libertad económica actual está intrínsecamente  ligada en la prosperidad de los pueblos, libres y democráticos.  Algunos deberían de estudiar más el caso vasco, donde Petronor, una filial de Repsol, convive pacíficamente con el gobierno nacionalista de Vitoria. A veces  asuntos complejos necesitan soluciones generosas por ambos lados.

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