Cuánto dura la anestesia del dentista
Muchos de los tratamientos que se llevan a cabo en la consulta de un dentista no producen dolor alguno, a pesar del mito tan extendido que consiste en creer que una visita casi siempre es dolorosa. Aun así, al realizar ciertas acciones, los expertos en salud bucodental optan por anestesiar al paciente.
El objetivo es claro: impedir que, durante el transcurso del proceso, la persona note el más mínimo dolor, sea cual sea el lugar exacto a tratar: desde las encías hasta ciertas piezas dentales. Pero, ¿cuánto dura la anestesia del dentista?
Para resolver esta cuestión, nos hemos puesto en contacto con el Doctor Leonardo Bardales, director de la clínica dental en Lanzarotedentist. La información que nos ha proporcionado dicho experto con una dilatada trayectoria a sus espaldas es muy técnica, pero la hemos resumido y explicado con nuestras propias palabras para hacerte saber fácilmente cuánto dura la anestesia del dentista.
De una a dos horas en la mayoría de casos
Lo primero que hay que saber es que la duración de la anestesia del dentista depende de varios factores, como por ejemplo el individuo que la recibe, así como el tipo de problema que va a ser tratado.
Aun así, en muchos de los casos que se abordan a diario en la consulta de un dentista, el período mínimo ronda los sesenta minutos. Por otra parte, el máximo se sitúa en las dos horas.
Básicamente esto es debido a que dicha cantidad de tiempo es más que suficiente para que el profesional lleve a cabo el proceso en cuestión. ¿De qué acciones hablamos? Una de las muy habituales consiste en hacer un empaste.
Supón que una caries ha afectado parcialmente a una pieza dental. Eliminarla y posteriormente restaurar ese diente empastándolo sería molesto e incluso doloroso para algunos pacientes, sobre todo si esa caries no fue tratada durante mucho tiempo. Con la anestesia del dentista, nada de esto sucede.
Continuando con los procesos que requieren una anestesia de una a dos horas, llega el momento de abordar otro que también es llevado a cabo muy frecuentemente en las consultas de los dentistas. Nos referimos a las extracciones de una o varias piezas dentales.
Las muelas del juicio, si salen del todo, pueden dejarse en la boca del paciente porque difícilmente ocasionarán problemas de algún tipo. Sin embargo, en caso de que no emerjan del todo, los dolores, las infecciones e incluso adversidades de mayor gravedad pueden acabar sucediendo.
Extraerlas no es nada complicado, obviando las molestias posteriores con las que el paciente ha de lidiar durante una o dos semanas, como por ejemplo la imposibilidad de masticar y tener que optar por alimentos como cremas, purés y caldos. La facilidad en el proceso quirúrgico viene dada por el hecho de que la muela del juicio, a pesar de no haber salido del todo, puede extraerse sin tener que hacerle un corte a la encía.
En ciertas situaciones bastante complejas se aplica una anestesia intravenosa que dura mucho más
Aunque hemos resuelto parcialmente la pregunta de cuánto dura la anestesia del dentista, todavía falta otro caso que hay que abordar: una operación quirúrgica más compleja. Continuando con el ejemplo que hemos puesto antes, supón que no es solo una muela del juicio la que va a ser extraída, sino que son las cuatro a la vez.
Por si fuera poco, el paciente tiene un problema de coagulación sanguínea, desde uno que da pie a que la sangre sea más espesa -como podría ser el Factor V Leyden- hasta aquel que deriva en todo lo contrario -ejemplificándolo la hemofilia-. En ambos casos, las precauciones deberían ser extremadas.
Cuando un proceso bastante más complejo que el habitual es el que debe llevarse a cabo, el dentista puede prescindir de la anestesia de una o dos horas de la que hablábamos antes para optar en su lugar por la intravenosa.
En tal caso, es imposible responder a la pregunta de cuánto dura la anestesia del dentista. Y es que dependerá por completo del tiempo que calcule el especialista que requeriría para resolver la situación.
Aunque la anestesia intravenosa genera muchos más temores en comparación con la de una o dos horas, has de saber que probablemente será esta última la que te administre tu dentista para abordar tu situación bucodental y ponerla en orden con el tratamiento oportuno.
En tal caso, tras un máximo de 120 minutos es probable que empieces a notar un leve hormigueo cuya intensidad irá aumentando hasta que recuperes por completo la sensibilidad. Hasta entonces, no conviene masticar, ya que sin querer podrías morderte la lengua y provocar así una herida que tardaría un tiempo en curar por completo.
Sabiendo lo poco que dura la anestesia del dentista y lo segura que es, no es de extrañar que los pacientes tengan cero temores al saber que les será administrada para un empaste, una extracción de muela u otro proceso bastante sencillo.
