La Asomada inicia sus fiestas con el pregón de Pablo Hernández González

Desde este fin de semana este pueblo de Tías celebra las fiestas en honor a San José Obrero.

Vea la galería de imágenes

La localidad de La Asomada inició sus fiestas patronales en honor a San José Obrero. El hijo del pueblo Pablo Hernández González fue este año el pregonero. Durante su intervención, ante un salón lleno de vecinos y visitantes, relató sus vivencias como niño y joven, recordó su etapa viajando en un súper petrolero con el que dio la vuelta al mundo y además charló sobre su gran afición a la composición musical como creador del Trío Los Roncos.

El pregonero explicó cómo era la vida en aquellos años del pasado siglo XX en esta parte del municipio de Tías. “Quiero contar a la gente joven cómo eran los tiempos de antes en el campo, en nuestra tierra. Allá en los años 40, 50 y también los 60, en este pueblo se vivía gracias al trabajo de todos en la familia. Cuando salíamos del colegio, siendo aún unos chinijos, te ibas directo al campo, o a otras cosas. Además de estudiar había que trabajar para ayudar a la familia a salir adelante”.

“Recuerdo -prosiguió relatando Hernández González- que, a veces, estando yo en el campo, mi tío Antonio Hernández, que era conocido en la isla por tener el Cine Hollywood en Arrecife, se quedaba mirando para mí y me decía: el trabajo de un niño es poco, pero el que lo desprecia está loco; ya ven que desde pequeño se me quedaban las coplas o pequeñas estrofas que más adelante me venían muy bien para componer mis canciones, una pasión”, recordó.

“Yo trabajaba en el campo desde que me salió el pelo, con solo 16 años me fui a trabajar al extranjero con mi amigo Pablo Reyes. Con este buen amigo tuve muchas andanzas por el mundo. Recuerdo que nos fuimos a Bélgica y en la pensión de la Mami, como se conocía, conseguimos trabajo en un petrolero noruego en el que dimos la vuelta a la Tierra unas cuentas veces. Ya desde estonces me gustaba lanzarme al mundo. Fue una época esa en la que estuve dos años trabajando día y noche para arreglar un poco nuestras vidas, sin ver a mi familia, a mis amigos y a mi tierra Lanzarote, que añoraba y la llevaba, como la sigo llevando, en el corazón…”, detalló Pablo Hernández durante la lectura de su pregón, en el que también tuvo recuerdos para la primera de las verbenas que se celebró en La Asomada, siendo él presidente de la Comisión de Fiestas y antes de que la iglesia estuviera terminada.

Tras la lectura del pregón actuó el trío musical Los Roncos, del que el pregonero es miembro y uno de los artífices de las letras de su amplio repertorio musical lleno de canciones canarias.