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El preso que agredió a funcionarios de Tahíche fabricó el pincho con una antena de televisión

UGT denuncia "la pasividad" del equipo directivo y pide el "cese inmediato" de los traslados de internos"violentos y conflictivos" al centro, al no estar preparado para este tipo de presos

 

Lancelot Digital


La sección sindical de FeSP-UGT de la prisión de Tahíche se ha solidarizado con los nueve funcionarios agredidos el pasado 9 de marzo por un interno "muy violento y peligroso" con un pincho carcelario y ha mostrado su "enérgica protesta" por la agresión.

 

FeSP-UGT denuncian asimismo "la pasividad por parte del equipo directivo del centro". Y es que, a juicio de la sección sindical, "el comportamiento observado por el interno en las últimas semanas hacía prever el desenlace que se produjo el pasado jueves, cuando agredió y lesionó" a nueve funcionarios.


"La permisividad por parte de la Subdirección de Seguridad, consintiendo que el interno tuviera libertad de movimientos por el centro, accediendo a todo tipo de exigencias del mismo y evitando utilizar las herramientas que el reglamento penitenciario permite en cuando a las limitaciones a los internos conflictivos y peligrosos, han provocado que el interno se creyera impune a toda reglamentación, desembocando en unos hechos que han puesto en serio peligro la integridad de los trabajadores penitenciarios", añaden en un comunicado. Según ha afirmado Ricardo Aparicio, responsable de FeSP-UGT, el interno fabricó el pincho carcelario con una antena de la televisión.

 

FeSP-UGT afirma que ha denunciado "en reiteradas ocasiones" que "estaban llegando conducciones de otros centros penitenciarios de máxima seguridad a este centro de internos altamente conflictivos y violentos", cuyas características arquitectónicas no están diseñadas para este tipo de internos". Según Aparicio, "hay otros cuatro o cinco internos en Tahíche con este perfil".

 

"Las deficiencias de seguridad del centro se han denunciado asimismo por FeSP-UGT ante el director, el centro directivo y la Inspección de Trabajo, pero lejos de solucionarlas, se siguen destinando internos conflictivos y violentos, sin ningún tipo de vinculación a la isla y con la aquiescencia de los Servicios de Clasificación y Tratamientos de la Secretaría General de Instituciones Penintenciarias".

 

De hecho, según cuenta el responsable de FeSP-UGT, el principal problema con el que se encontraron los funcionarios a la hora de reducir al preso, conocido como "el chicharrero" según ha podido saber Lancelot Digital. fue precisamente el tamaño reducido de la celda, que hizo que los funcionarios tuvieran que acceder de uno en uno. Ricardo Aparicio, que apunta haber trabajado en prisiones de máxima seguridad, afirma no recordar una agresión igual.

 

Piden el cese "inmediato" de los traslados de internos "violentos y conflictivos"

 

Por todo lo anterior, "y en defensa de la seguridad laboral de los trabajadores penitenciarios y en prevención de nuevos incidentes", UGT solicita "el cese inmediato de los traslados de internos con antecedentes violentos y conflictivos al centro penitenciario de Tahíche". Al respecto, Aparicio afirma que, según ha podido saber, la dirección del centro ya está gestionando el traslado

 

Asimismo, el sindicato solicita "el desarrollo inmediato de protocolos específicos y adaptados a las deficientes condiciones de seguridad del centro para el tratamiento de los internos con perfil violento y conflictivo hasta su traslado a otros centros más adecuados" y de "un plan de formación adecuado para hacer frente a las situaciones de violencia de internos para los trabajadores penitenciarios".

 

FeSP-UGT también pide que se considere a los trabajadores penitenciarios "agentes de la autoridad" en el ejercicio de su pargo por parte de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias.

 

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