PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

Interceptan a dos pescadores furtivos tras darse a la fuga y arrojar las capturas al mar

La Guardia Civil los ha denunciado por pescar ilegalmente en la Reserva Marina de La Graciosa e Islotes del Norte de Lanzarote

 

 

Lancelot Digital

 

El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil procedió a la denuncia administrativa el pasado día 18 de dos personas de 35 y 36 años de edad, de nacionalidades española y extranjera, ambos vecinos de Arrecife, por practicar pesca submarina dentro de la Reserva Marina, concretamente en las proximidades de La Graciosa, de Montaña Clara y de Alegranza.

 

Dentro de las actividades rutinarias que el Seprona realiza contra la pesca y venta ilegan de pescado procedente del furtivismo, se procedió a realizar un seguimiento exhaustivo a dos infractores, pudieron comprobar que realizaban pesca submarina de manera rutinaria en las proximidades de La Graciosa, de Montaña Clara y de Alegranza, sin respetarl a protección asignada al entorno de la Reserva Marina de interés pesquero.

 

Según informa la Benemérita, los denunciados se dedicaban a la pesca submarina furtiva de manera profesional desde 2007, año del que ya constan denuncias administrativas por realizar la pesca ilegal detectadas por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

 

Se desplazaban a la reserva desde Lanzarote en una zodiac de su propiedad, equipados con fusiles y resto de material de pesca, a plena luz del día y publicaban las fotografías de sus capturas más características en las redes sociales. Posteriormente las comercializaban sin pasar por la lonja, careciendo así todo el género de las debidas garantías sanitarias y vendiendo el pescado un precio inferior al marcado en el mercado.

 

Tras realizar las correspondientes pesquisas policiales y seguimiento de los hechos durante la investigación, el Seprona interceptó el pasado día 18 la zodiac en la que se desplazaron para pescar dentro de la Reserva Marina.

Fueron avistados desde el momento que accedieron a la zona protegida y vigilados durante las seis horas que duró la pesca, observando cada detalle del traslado del pescado en la embarcación con los fusiles utilizados, desconociendo que se les venía haciendo un seguimiento desde la Reserva Marina.

 

Posteriormente fueron interceptados por la Guardia Civil de Costa Teguise en el Varadero de Caleta de Caballo con el género capturado y los fusiles a bordo, desobedeciendo las indicaciones de los agentes para proceder a su identificación. Se negaron a sacar las capturas de la embarcación, dirigiéndose a Famara para poder cumplir el objetivo de arrojar al mar toda la pesca capturada ilegalmente y así eliminar pruebas.

 

Finalmente, la embarcación fue interceptada en la Playa de Famara por la Guardia Civil de Costa Teguise, donde se procedió a su identificación y a la incautación de las artes utilizadas para la pesca.

 

Multas de hasta 300.000 euros

 

La Guardia Civil considera que los dos denunciados han cometido infracciones graves según la Ley de Pesca de Canarias al ejercer la actividad pesquera sin la correspondiente autorización y eliminar o alterar pruebas para impedir el conocimiento de la comisión de una infracción. También cree que los denunciados son culpables de una infracción muy grave, por realizar actividades no permitidas en zonas protegidas de interés pesquero.

 

Las sanciones, segín informa la Benemérita, pueden ir de los 301 a 60.000 euros en el caso de las infracciones graves y de los 60.0001 a 300.000 euros la intervención del buque utilizado así como la incautación de las artes y aparejos en el caso de las muy graves.

 

Su conservación "depende de todos" 

 

Desde la Guardia Civil recuerdan que la Reserva Marina de La Graciosa e Islotes es la primera reserva marina de Canarias, creada en 1995, y la más extensa de Europa, con 70.700 Hectáreas. El fin de la reserva marina es la protección, regeneración y el desarrollo de los recursos de interés pesquero para el mantenimiento de pesquerías sostenibles que permitan a los pescadores artesanales de la zona preservar su tradicional modo de vida.

 

En este sentido, la Benemérita señala que la conservación de la reserva marina protegida "depende de todos" y pide a la población que se informe sobre las limitaciones de uso y colabore en su protección y mantenimiento, recordando que queda prohibido cualquier modalidad de pesca de recreo, salvo la de curricán por fuera de un círculo de tres millas centrado en el Roque del Este, toda clase de pesca profesional y cualquier extracción de flora y fauna marinas, exceptuándose las autorizadas con las correspondientes normas de creación y cualquier tipo de instrumento portado por los buceadores a mano o embarcación que pueda utilizarse para la pesca o extracción de especies marinas.

 

Las autorizaciones para la práctica del buceo autónomo de recreo se tramitan ante el Área Funcional de Agricultura y Pesca de Las Palmas y los servicios territoriales de la Viceconsejería de Pesca de la Comunidad Autónoma de Canarias, según la zona de buceo, informan desde la Guardia Civil.

Comentarios (7)