Arrecife se desmorona arquitectónicamente mientras los políticos que gobiernan discuten por un cartel

Por Bruno Perera

Cuando leo y/o escucho noticias sobre la ciudad de Arrecife siento ganas de decirles a todos los políticos que gobiernan en el Ayuntamiento que dejen sus asientos y se vayan a sus casas porque pierden el tiempo en discusiones banales que no solucionan los problemas sociales ni tampoco los arquitectónicos que padece la urbe, como son la pobreza en los barrios y los edificios y casas en ruina y abandonados/as por la desidia y la falta de operatividad que poseen los políticos de turno.

Los partidos políticos que han gobernado Arrecife, cada cual en su etapa, han estado unos 30 años discutiendo sandeces sobre esto y lo otro, pero ninguno ha tenido la osadía de tomar al toro por los cuernos y de una vez por todas fajarse en pro de restaurar la ciudad.

Las reliquias lanzaroteñas como es el puente de La Bolas y puente hacia el muelle pesquero, están ambas con la necesidad de una restauración urgente, pero parece que nadie ve nada, como por el ejemplo: el Puente Las Bolas tiene sus dos torres quebradas, le falta cimentación a los bloques de piedra que las sujetan, las torres están algo inclinadas y una piedra de uno de sus arcos cayó al mar; amén de otras carencias que no menciono pero que les urge al mismo una pronta restauración.

Por otro lado hay como unas 100 casas de unos 150-200 años situadas entre las calles Coronel Benz, Tenerife, Cien Fuegos, Cuatros Esquinas, La Vega, Charco San Ginés, Islote del Francés y en otros lugares como la Casa de los Sifoneros, localizada al final de la calle Fajardo, que presentan signos de abandono y que piden a gritos que sean demolidas y reconstruidas porque no poseen nada que se pueda restaurar como obra antigua a preservar. Igualmente también hay edificios de 5 y 6 pisos en esqueleto dejados de la mano de Dios y llenos de chatarra, desperdicios y basura. Pero los políticos ciegos cantan: “todo está bien, mejor nos dedicamos a discutir durante días por la presentación del cartel de la fiestas de San Ginés porque eso da comidilla al pueblo que tenemos embobado”.

Yo les aconsejo, tal como les añado, tomen la foto del Puente de Las Bolas y boca abajo publíquenla como cartel de las fiestas de San Ginés y así informar de verdad a la gente que Arrecife necesita una pronta restauración arquitectónica y no discusiones necias que mantienen al pueblo en un estado tercer mundista y a la ciudad con lares semejantes a zonas de Afganistán o de Siria.