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La delicada línea fina: Nuestros hijos

Juani Alemán

 

Un tema, que me preocupa considerablemente, es la salud emocional de los niños. Sí, es crucial investigar y comprender la situación familiar de los niños para entender mejor los motivos detrás de sus comportamientos. El entorno familiar juega un papel fundamental en el desarrollo y bienestar de los niños, y varios factores pueden influir en cómo se comportan. A mi modo de ver,  las experiencias emocionales de los niños en casa, como el amor, la seguridad, la estabilidad o, por el contrario, el estrés y la inseguridad, tienen un impacto directo en su comportamiento. Entender estas experiencias puede ayudar a identificar las causas subyacentes de ciertos comportamientos. He podido observar, por mi trabajo, que los niños que enfrentan situaciones difíciles en casa, como conflictos familiares, violencia, o falta de atención, pueden desarrollar comportamientos problemáticos como una forma de afrontar estas situaciones. Conocer el contexto permite entender estas conductas como mecanismos de defensa o de búsqueda de atención.

 

Los padres y su relación con ellos,  influyen en el desarrollo social y emocional , esto puede manifestarse en el comportamiento del niño en otros contextos, como la escuela.

 

Los niños aprenden comportamientos observando a sus padres y otros adultos en su hogar. Si los padres muestran conductas inadecuadas o problemáticas, es probable que los niños las imiten. Comprender el entorno familiar puede ayudar a identificar estos patrones de comportamiento aprendidos. La salud mental  de  puede afectar el bienestar de los niños y su comportamiento. Por ejemplo, la depresión de un padre puede llevar a un ambiente menos afectivo y más tenso, lo cual puede reflejarse en el comportamiento del niño.

 

Al comprender el contexto familiar, se pueden desarrollar intervenciones más efectivas y compasivas que no solo traten los síntomas del comportamiento, sino que también aborden sus causas raíz.

 

En resumen, al priorizar y cuidar nuestra salud mental, estamos equipando a nuestros hijos con las herramientas necesarias para manejar sus propias emociones y desafíos de manera efectiva. Esto no solo mejora su bienestar actual, sino que también los prepara para una vida adulta más equilibrada y saludable.

 

Creo que las madres con problemas de adicciones deben rehabilitarse antes de tener hijos, el consumo de sustancias durante el embarazo puede causar serios problemas de salud en el feto, incluyendo síndrome de abstinencia neonatal, defectos congénitos, bajo peso al nacer y problemas de desarrollo físico y mental, las adicciones pueden afectar la capacidad de una madre para cuidar adecuadamente a su hijo. Las madres que luchan con adicciones pueden enfrentar dificultades para proporcionar un entorno seguro, estable y de apoyo para sus hijos. Promover la rehabilitación antes de la maternidad puede tener beneficios significativos para las madres, sus hijos y la comunidad. No obstante, estas iniciativas deben ser implementadas con sensibilidad y respeto por los derechos de las mujeres.

 

En resumen, un niño feliz no solo se siente mejor en su día a día, sino que también está en una posición óptima para aprender y desarrollarse académicamente. Crear un ambiente que fomente la felicidad y el bienestar emocional en los niños es, por lo tanto, esencial para su éxito educativo y personal.

 

Según Goleman, da igual lo brillante que sea tu estrategia, es necesario contar con las personas, para implementarlas.

 

Somos sus referentes, ellos nuestras circunstancias. Cosamos con hilos de oro, nuestras responsabilidades y tendremos, niños más felices.

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