Un grupo de inversores privados competirá con el Cabildo por gestionar Marina Colón
César Miralles y otros empresarios presentan a Puertos un proyecto deportivo, náutico y gastronómico “que generará empleo y mejorará turísticamente la isla”
Texto y foto: Lancelot Digital
Un grupo de empresarios competirán con el Cabildo por gestionar las instalaciones de Marina Colón. Entre ellos se encuentra César Miralles, que fuera director general del Tesoro del Gobierno de Canarias cuando el PP gobernaba con CC en la anterior legislatura.
Estos inversores tienen la intención de recuperar el restaurante que existe en este espacio, ubicado en El Cable, y ceder las instalaciones del Centro Insular de Deportes Náuticos a la Primera Corporación, para que se sigan realizando actividades ligadas con la vela. De hecho, estos empresarios mantuvieron una reunión con representantes del Cabildo y de Puertos para intentar llegar a un acuerdo, algo que no se logró.
Este miércoles se daba a conocer la noticia de que el Cabildo tenía previsto invertir 200.000 euros en mejorar estas instalaciones, aclarando que antes se tendría que formalizar la concesión administrativa por parte del Gobierno de Canarias, pues este espacio es competencia de Puertos.
Miralles y el resto de empresarios aclaran que, habida cuenta de que existe otra propuesta para esta zona, la adjudicación debería realizarse “mediante el procedimiento de proyectos en competencia, debiéndose aprobar previamente por la entidad Puertos Canarios los criterios y baremos que habrán de regir la adjudicación”. Es decir, que todas las propuestas tienen que concurrir en igualdad de condiciones. “Estaremos vigilantes para que el Ente Puertos de Canarias así como el Cabildo de Lanzarote respeten que se cumpla con la legalidad vigente y que se convoque concurso público” para gestionar esta zona.
Estos empresarios creen que su propuesta es más positiva que la del Cabildo pues pretende convertir el lugar en una zona con oferta “náutica, de ocio y deportiva, así como gastronómica”, a la par que se genera “empleo y se contribuye a mejorar la imagen turística”.
La propuesta inicial presentada recoge una inversión de 107.000 euros, que se incrementará en la propuesta definitiva, e incluye un canon a favor del Gobierno autónomo. El proyecto se compone de un restaurante-cafetería con terraza, un espacio de entrenamiento y relajación con vistas al mar, además de una zona con formación práctica y teórica en el ámbito náutico.
Las obras incluyen mejoras importantes sin alterar la estructura de la edificación y, además, se prevé emplear como mínimo a diez personas. La intención es explotarlo por un periodo de 15 años, aunque la ley establece un máximo de 30 años.
