El agua, un tesoro imprescindible para Lanzarote
Economizar en el consumo de agua es una necesidad en una isla en la que la lluvia suele pasar de largo y que ha sobrevivido gracias a las desaladoras
Vivimos en un paraíso en medio del Atlántico. Lanzarote, isla Reserva de la Biosfera, exige que la población se conciencie de su fragilidad. El respeto al Medio Ambiente, la concienciación con el territorio, el mantenimiento de sus aguas son sólo algunos de los requisitos ineludibles para conseguirlo. Desde Lancelot Medios queremos apostar directamente por esa sostenibilidad, concienciando a los lanzaroteños de las exigencias que conlleva. La fortaleza de Lanzarote reside en el respeto a su fragilidad.
Y si hay un bien escaso en una isla es el agua. En Lanzarote la lluvia suele pasar de largo debido a la escasez de picos altos y montañas. Por este motivo, durante años la escasez de agua era una condena. Este problema se solucionó de la mano de Manuel Díaz Rijo, que fue quién materializó la idea de instalar en la isla una desaladora, la primera de Europa, que se inauguró en Arrecife en 1964. Se trataba de una instalación de segunda mano importada de la base militar estadounidense en Guantánamo. En aquella época la desalación salvó la vida de los lanzaroteños. En la actualidad la totalidad del agua consumida por los lanzaroteños y majoreros, sigue siendo desalada.
Pero hablemos de datos. El consumo de agua potable en Lanzarote, de cuya producción se encarga Canal Gestión Lanzarote, en 2018 fue de 11.898.087 toneladas, cantidad de la que se reutilizaron 2.051767 toneladas. En la isla hay 71.582 abonados y el municipio de Tías es el mayor consumidor de agua, alcanzando nada menos que la cuarta parte del total insular, por encima incluso de Arrecife, aunque sólo tiene la mitad de abonados, algo que se entiende si se piensa en el consumo turístico.
Beneficios y renovables
Desde que nació Inalsa en agosto de 1988 siempre ha ido acarreando deudas que se fueron acumulando hasta que en 2009 entra en concurso voluntario de acreedores, que no finaliza hasta finales de 2013, fecha en que se celebra una sesión extraordinaria de la Asamblea General del Consorcio del Agua de Lanzarote y se acuerda que esta institución asuma, en nombre de INALSA las obligaciones de pago de esta entidad por una cantidad de 36.253.690 euros, resultante de la quita que suponen los créditos concursales. El pago de la deuda se efectúa tras el contrato con Canal de Isabel II. Este hecho permitió pagar las deudas, pero también implica el inicio de un plan inversor de 55 millones de euros que renueva parte de las infraestructuras del ciclo integral del agua que permite salir a la Isla de emergencia hídrica, al mismo tiempo que elimina los cortes continuos de agua en la práctica totalidad de las localidades de Lanzarote. Este año, por primera vez en décadas, lograba 980.000 euros de beneficios.
Los beneficios, también llegan por las energías renovables, ya que en 2007 Inalsa se presentó al concurso público que hizo la Consejería de Industria, Comercio y Nuevas Tecnologías del Gobierno de Canarias para para la asignación de potencia en la modalidad de nuevos parques eólicos y le concedieron: el Parque Eólico Arrecife I; Parque Eólico San Bartolomé; Parque Eólico Teguise I; y el Parque Eólico Teguise II. Se ha construido el Parque Eólico Teguise I en la ladera de la Montaña de Zonzamas y la Subestación Callejones, infraestructura imprescindible para verter la energía eólica y transformarla.
Trucos para ahorrar agua en casa
Cierra los grifos siempre que no los uses (al fregar, enjabonarte o lavarte los dientes).
Dúchate en lugar de bañarte, una ducha gasta un 50% menos.
Recoge el agua de cuando esperas a que se caliente, y reutilízala (regar, fregar el suelo…).
Coloca 2 botellas llenas dentro de la cisterna y ahorrarás de 2 a 4 litros cada vez que la uses.
Utiliza de forma eficiente los electrodomésticos: pon la lavadora, el lavavajillas y similares siempre cuando estén totalmente llenos.
Si tienes jardín, riega tus plantas al amanecer o al anochecer porque así evitarás que el agua se evapore antes de ser absorbida.
No limpies el suelo con manguera, usa una escoba.
Arregla enseguida cualquier fuga de agua: un grifo goteando puede suponer hasta 40 litros de agua al día.
