Espino se defiende ante el juez: “No supervisaba los pagos en los CACT”
El socialista está siendo investigado por su gestión en los Centros Turísticos por presunta malversación de fondos públicos
Lancelot Digital
El que fuera secretario general del PSOE en Lanzarote señaló ante el juez que él no supervisaba lo que firmaba, al entender que estaban correctos los contratos o pagos que realizaban los Centros Turísticos cuando él era el máximo responsable de los mismos, según recoge Canarias 7. Durante más de dos horas declaró este miércoles Espino en los Juzgados de Arrecife por la querella presentada hace siete años por el Consejo de Administración de esa sociedad turística del Cabildo, que entendió que el entonces líder del PSOE pudo malversar fondos públicos.
Según recoge Canarias 7, Espino eludió su responsabilidad aún reconociendo que los contratos y pagos cuestionados en última instancia los firmaba y autorizaba él, pero que ni los visaba ni hacía seguimiento. Justifica esa actuación porque daba por sentado que los procedimientos de contratación y de pagos de facturas eran correctos. De alguna manera trató de quitarse cualquier culpa al entender que si había alguna irregularidad en esas contrataciones, cosa que dudaba que hubiera, eran de los técnicos.
Espino siempre insistió que su función al frente del Consejo de Administración era puramente política y que por lo tanto no entraban entre sus funciones las labores de fiscalización de los contratos. Ante la pregunta de si firmó facturas por obras o servicios que presuntamente no se realizaron, señaló ante el juez que si se hacían esos pagos era porque las obras estaban hechas y con el visado correspondiente de los técnicos.
Este jueves estaba previsto que declaran los dos peritos que inicialmente constataron que se había pagado un sobrecoste por la ya famosa cocina de Los Jameos, que fue adquirida por los Centros Turísticos a una empresa de un conocido afiliado del PSOE.
Aunque la querella contra Carlos Espino se interpuso hace siete años, ha empezado realmente a moverse en estos últimos meses. En esos años de instrucción prácticamente no se agilizó la misma por cuestiones formales, realizándose sólo el peritaje.
La denuncia de Carlos Espino levantó mucha expectación en su día, cuando se conocieron las posibles irregularidades en la gestión de los Centros Turísticos. Unos centros que cuando él los gestionó acumuló la mayor deuda de toda la historia, casi 20 millones de euros. Era cuando se pagaba un alquiler millonario por Los Aljibes de Tahíche, sin que nunca se les diera actividad alguna, cuando se realizaron contratos publicitarios también desorbitados o se compraba la carne a una empresa cercana a la entonces presidenta del Cabildo sin concurso previo. Algunos de esos hechos están en la denuncia presentada contra él hace ahora nada más y nada menos que siete años.
