Los trabajadores de los CACTs decidirán hoy si van o no a la huelga
Algunas voces opinan que no merece la pena hacerle más daño a la isla y esperar a la decisión del Juzgado
Los trabajadores de los CACTs celebrarán esta tarde una asamblea donde, entre otros puntos, debatirán si ir de nuevo o no a la huelga, que a pesar de haberse incorporado a sus puestos de trabajo tras los parones del pasado mes de agosto, mantienen en pie.
Según fuentes cercanas a la asamblea de los trabajadores, es muy probable que no se atrevan a volver a la huelga tras el fiasco de la anterior, y según algunas voces, por mala imagen que han dado a la ciudadanía por 30 euros que reclaman en sus suculentas nóminas, que causó a la isla más de 3 millones de euros de pérdidas de manera directa, y otro tanto a los sectores relacionados con la actividad de los Centros Turísticos.
Asimismo, algunos trabajadores opinan que una huelga de estas características tan drásticas, se deben hacer para asuntos más sangrantes y de mayor calado, no por las cantidades que ellos pelean, aunque no descartan tomar otras medidas.
Un acuerdo fracasado
El pasado 15 de agosto los trabajadores de los Centros Turísticos de Lanzarote, tras varios intentos de negociación fracasado con la dirección de empresa, decidieron sumarse a una huelga que paralizaría la actividad turística de la isla, siendo la visita a los mismos la más importante, durante 20 días.
Muchos fueron los sectores como los taxistas, guías turístico o alquileres de coche que se manifestaron en contra de esta problemática que trascendía en gran parte de la economía de la isla, llegando a cifrarse pérdidas solo en la compra de entradas a los Centros, de más de 3 millones de euros.
El conflicto surgió cuando el comité de huelga se agarró a una sentencia donde se reconocía que a los nuevos trabajadores, no a los antiguos, no les correspondían los pluses de disponibilidad, transporte y lavado de uniforme, porque la dirección de la empresa entendía que ya estaban recogidos en el complemento personal. Poco más de 30 euros para unas nóminas que no bajan de los 1.400 euros y pueden llegar a alcanzar los 3.000 euros.
Para la dirección de la empresa y para los informes de Intervención, Recursos Humanos, Servicios Jurídicos, entre otros, del Cabildo, esa "subida" del salario de más del 4% se presume ilegal por no ajustar a la Ley de Presupuestos Generales del Estado, tal y como manda la ley entre los trabajadores públicos.
Para la oposición, esos informes no tienen nada que ver con su realidad y ya en un pleno extraordinario solicitado por ellos mismos, pidieron la subida salarial reclamada, aunque no fueron capaces de votarla en el Consejo de Administración, órgano pertinente, a pesar del ofrecimiento del presidente del Cabildo para que fuera alguno de los miembros de la oposición quienes tuvieran la potestad de ejecutar el acuerdo, ante el rechazo San Ginés a ejecutar "algo ilegal".
Dice el consejero de Turismo del Cabildo, Echedey Eugenio, que la rendición en el Consejo de Administración de los CACTs por parte de los miembros de la oposición, se debe que, al contrario de los acuerdos plenarios, en los Consejos de Administración, los miembros responden de su patrimonio personal, y ante una ilegalidad, como se presume, serían los propios consejeros quienes tengan que responder a las consecuencias.
Conflicto políticos - consecuencias económicas
Muchas han sido las voces públicas quienes han afirmado que esta lucha que junto con la guerra de Montaña Roja, le costó a la isla la estabilidad en el Cabildo debido a la salida del PSOE del gobierno insular, se trata de una guerra política que supone un punto más para sacar a San Ginés del despacho de presidencia.
Las relaciones labores y personales que unen a los cabezas de esta huelga con personalidades del Cabildo, han puesto en entredicho la transparencia de la causa. Cabe destacar la relación conyugal entre la Consejera de Somos Lanzarote, Maripaz Cabrera, y el presidente del Comité de Empresa de los CACTS, Antonio Bonilla, siendo la primera además representante del Comité de Empresa, y, al parecer, trabajadora del despacho de Andrés Barreto, asesor de los trabajadores.
Por primera vez en la historia de las huelgas de los CACTs, los trabajadores vieron afectadas su nóminas como ocurre con el resto de trabajadores que hacen este tipo de reivindicaciones, que aunque legales, tiene consecuencias. Un problema que agravó la situación de las familias que el mes de agosto solo contaron con la mitad del sueldo regular.
