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Quince años de cárcel por quemar una casa con su expareja e hijo dentro

La Audiencia Provincial le considera culpable de un delito de incendio y de otro de lesiones 

 

  • Yolanda Téllez
  • Jesús Betancort

  • La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha condenado a 15 años de cárcel al ciudadano italiano de 41 años que quemó la casa de su expareja y su hijo en el barrio de Argana Alta (Arrecife) mientras dormían. Vicenzo Pernice tampoco podrá acercarse a menos de 500 metros de las víctimas ni comunicarse con ellas durante 25 años. Igualmente le impone la inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad hasta que el menor alcance la mayoría de edad. Además, deberá indemnizar a su hijo con 630 euros por las lesiones sufridas y pagar una indemnización a la propiedad de la vivienda de 5.542,93 euros por los daños causados.


    La Audiencia Provincial considera probado que, sobre las 5 horas del 2 de noviembre de 2014, Vicenzo Pernice roció gasolina, que previamente había comprado en una gasolinera, sobre la puerta principal de la vivienda "con ánimo de prender fuego" a la misma y "a sabiendas de que allí se encontraban su expareja y su hijo, de entonces tres años de edad, a pesar de que el ahora condenado declaró en el juicio que pensaba que la casa estaba vacía y que su intención era sólo "asustar".

     

    "El incendio se produjo en la vivienda de la expareja y del hijo del acusado rodeada por más viviendas y a una hora en la que las personas están normalmente durmiendo, por lo que el conocimiento del peligro para la vida y la integridad física de las personas que habitaban la casa y en horas nocturnas es palmario", sostiene la sala, que apunta que "es natura que no sólo hubiera personas en el interior del inmueble y dúplex colindantes, sino también con menores posibilidades de apercibirse el peligro que corrían por estar entregadas al suelo, siendo de esperar que el fuego con un vertido de combustibles, unos dos litros de gasolina, causara los efectos que causó, incluso peores".

     

    La Audiencia también considera acreditado que "el fuego fue en la puerta de la casa" y no en la cochera como declaró el acusado. "En la cochera hay una mancha de humo, pero era anterior a estos hechos", se señala en la sentencia. "Para este tribunal no existe duda de que el procesado quería prender fuego a la vivienda y que abandonó el lugar sin preocuparse de lo que pudiera suceder", añade la sala, teniendo en cuenta los testimonios de los policías nacionales que declararon en el juicio.

     

    Además, el tribunal también da valor al testimonio de la expareja del acusado, que negó que ella le hubiera dicho que iba a pasar la noche a casa de una amiga como él declaró. La mujer también afirmó durante el juicio que Vincenzo Pernice "incumplía continuamente la pena de alejamiento" que le había sido impuesta en una sentencia que le condenó por un delito de coacciones a su expareja y que "la había amenazado en alguna ocasión con quemarla".

     

    "No existe duda para este tribunal, porque el propio acusado lo reconoce, que fue el autor del incendio y que además tenía la intención de provocarlo sin importarle las consecuencias que podrían tener sus actos para su expareja e hijo, incluso necesitó de una cierta preparación, pues tuvo que comprar la gasolina que emplearia en su acción", se añade en el fallo.

     

    "Ningún arrepentimiento sincero"

     

    La defensa del acusado pidió durante el juicio que se aplicara la atenuante de confesión, pero la sala considera que no concurre, porque en su primera declaración en los Jugados no admitió los hechos y, durante la vista, a juicio de la sala, no mostró "ningún arrepentimiento sincero". "Sus manifestaciones han ido encaminadas a minimizar su conducta diciendo que sólo pretendía asustar, que pensaba que no había nadie en la casa y que lo hizo porque había consumido drogas", añade el tribunal, que también rechaza aplicar la atenuante de haber actuado bajo la ingesta y afección de sustancias estupefacientes porque "ninguna prueba hay de ello".

     

    La mujer y su hijo lograron salvar sus vidas gracias a que ella se despertó como consecuencia del humo y unos vecinos les ayudaron a salir de la vivienda por la azotea "al no disponer de otra vía de salida. Como consecuencia de los hechos, el menor, que es asmático, resultó herido por inhalar humo necesitando una semana de hospitalización. Además, causó daños en el domicilio, los cuales fueron tasados pericialmente en 5.542,93 euros.

     

    La Audiencia considera a Vincenzo Pernice culpable de un delito de incendio en concurso ideal con un delito de lesiones con la agravante de parentesco y atenuante de reparación del daño, imponiéndole doce años de cárcel por el delito de incendio y tres por el de lesiones.

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