PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

El británico que “violentó” a la camarera de piso condenado a 2.000 euros

El juicio rápido demostró que acosó e intentó tener relaciones sexuales a cambio de dinero

 

  • Lancelot Digital
  •  


    El británico que acosó en su “villa” de un hotel del sur de la isla a una joven camarera de piso de 20 años fue condenado en un juicio rápido a 2.000 euros y obligado a no estar cerca de ella, como mínimo a 200 metros.

     

    Los hechos se desarrollaron en pleno mes de agosto aunque no ha salido a la luz pública hasta que el colectivo de las Kellys la dio a conocer en un comunicado de prensa.

     

    Según se relata en la sentencia, el turista acosó a la joven camarera cuando entró a limpiar la villa. Así, "cuando la mujer se mete en el baño, el británico la retiene y le enseña un móvil con “59” euros en la pantalla, dando a entender que le pagaría por mantener una relación sexual".

     

    La joven camarera asustada tuvo la habilidad de coger su teléfono móvil, aunque lo tenía apagado, y disimular que estaba hablando con la policía, por lo que el turista la dejó ir por miedo.

     

    Sin acuerdo en la aplicación del protocolo

     

    Al parecer, según fuentes del sector la joven contó lo sucedido primero a su suegra y posteriormente a la dirección de guardia, “quién aplicó el protocolo” . En ese punto no hay acuerdo dado que el colectivo de limpiadoras de piso critica el poco o nulo apoyo de la dirección del hotel a su joven trabajadora.

     

    De hecho, señala que esa noche ya no durmió el cliente en el hotel sino en el calabozo tras la denuncia presentada en la Guardia Civil que activó el protocolo y se realizó un juicio rápido pues el turista regresaba a Inglaterra ese mismo día.

     

    Fuentes del sector turísticos repudian lo sucedido y apoyan a la joven trabajadora al considerar inadmisible lo ocurrido. Por mucho que consideren que son casos aislados y que no se puede generalizar si creen que habrá que afinar más los protocolos para este tipo de casos para lograr que sean cero los casos de acosos de turistas o de propios trabajadores a la mujeres.

     

    Lanzarote recibe casi tres millones de turistas al año y las denuncias por acoso sexual en el ámbito del trabajo por turistas son por suerte escasas, pero eso no significa que no se le dé la importancia que tiene casos como el de la joven camarera, “totalmente rechazable”.

    Comentarios (3)