PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

De las hostilidades a la estupidez

Por Antonio Coll

 

 

El Consejo Regulador del Vino confirma el dato definitivo de 3,7 millones de kilos de uva los recolectados en las bodegas existentes en el Paraje Natural de La Geria, excluyéndose unos 200.000 kilos de uva que permanecen en las parras, al verse imposibilitada la industria vitivinícola a recogerla, por falta de capacidad. Esto se ha debido al “descomedido” e incongruente cierre cautelar de Bodegas Stratvs que recolectaba más de 500 mil kilos. El ente regulador expone que la vendimia de este año ha sido la más abundante de la última década. El propio consejo destaca el esfuerzo que han realizado las diferentes bodegas para asumir la mayor cantidad de uva posible, pero no se puede obviar las limitaciones de capacidad de las mismas. Y aquí entramos de nuevo en las cuestiones legalistas que impiden que el sector vitivinícola progrese de forma natural y se consolide como un sector económico importante en la isla. Las trabas e impedimentos recogidas en el Plan Especial de La Geria, redactado en 1991, son culpables de que una óptima cosecha de uva, en vez de alegrarnos, se convierte en un problema porque, desde entonces, determinados gobernantes no han hecho sus deberes correctamente. Pero después de tanto tiempo y cuando ya se ha redactado la modificación del citado plan para encajarlo en la realidad, vuelven las hostilidades de algunos grupos políticos en contra de la modernización y actualización del Plan Especial. En estos últimos días hemos tenido que escuchar, por boca de algunos, la estupidez de manifestar que “lo mejor sería que la ampliación de las bodegas se hiciera en zonas industriales”. Frivolizar en esta cuestión me parece poco serio, pero peor aún es cuando se percibe que dicho discurso, en el fondo lo que persigue es impedir la modificación puntal del instrumento legal redactado por el propio Gobierno de Canarias y, a falta solo, la aprobación por parte del Cabildo de Lanzarote. Prefieren un paraje lleno de aulagas antes que legalicen una bodega, que es eje de una persecución, que se puede calificar en términos psicológicos de “paranoica”. Lamentablemente no tienen remedio. Poco les importa el territorio, el paisaje, la ecología…Solo quieren que Bodegas Stratvs desaparezca. Seguro que si cambia de propietario, la respaldarían a los cuatro vientos.

Es obvio que las bodegas constituye el pulmón principal para conservar el paraje natural de la Geria. Los viticultores se sustentan gracias a la elaboración y producción del vino. Y con su trabajo y esfuerzo, cuidan y mantienen el paraje que igualmente sirve como atractivo turístico. En los últimos diez años, la Geria ha florecido gracias al binomio: bodegas-viticultor. Ambos son inseparables. Por eso, se exige una respuesta personalizada y urgente para dar encaje jurídico a las infraestructuras implantadas que, dicho sea de paso, no constituye ningún impacto medioambiental de la zona. Todo lo contrario. Porque además las bodegas sirven también para ofrecer servicio de restauración y de museo. También sirve de acogida para miles de estudiantes residentes, que se interesan por el cultivo y elaboración de nuestros caldos, muy prestigiados en todo el mundo.

 

Mientras el paro sube en la isla de Lanzarote, y ya son 13.812 desempleados, por otro lado, ponemos freno a una industria y se le impide progresar y ofrecer riqueza para sus habitantes. Y todo por un entramado jurídico, exageradamente, proteccionista que, como se ha comprobado, su filosofía de fondo, es convertir el Paraje Natural de La Geria, en un parque de aulagas y malas hierbas.

 

De hostilidades y estupideces ya estamos hartos en esta isla. La alternativa sostenible, el antídoto para facilitar el florecimiento de la Geria está en manos de los grupos políticos que conforman el gobierno insular. Es su responsabilidad ¡Salvar La Geria!

Comentarios (2)