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El Timple de Don Pedro

Santiago Negrín

 

Somos gentes de buena voluntad. Por eso, cuando Pedro Sánchez estuvo por aquí hace meses, el Presi Torres le regaló un timple de nuestra parte. Sánchez y sus compadres (ministros) están tocando mala música con un instrumento amable. Están mal afinando y apretando las clavijas (¿o el Clavijo...?) demasiado, y a ver si van a rompe el traste.

 

Con el asunto Inmigración nos dejan solos. Nos han abandonado. Y nos la pretenden (perdonen el tono) colar doblada, al ritmo de “tras, tras” por detrás...”. Todas las expresiones (algunas bastante soeces), que se me ocurren, son suaves. Incluso han conseguido lo imposible, poner de acuerdo, más allá de colores e ideologías, a todos los partidos.

 

Al final va a ser verdad lo que me resistía a creer, y que siempre he dejado en el ámbito de la exaltación de las 7 estrellas verdes: que en Península les importamos un carajo. El timple de Pedro Sánchez suena muy desafinado. Toca música muy fea para estos humildes isleños, casi africanos, y también para su gente del PSOE en Canarias, que asiste atolondrada y en estado de choque, a los desvaríos del equipo médico habitual.  

 

Fíjate que le regalamos el timple, de “buen rollito” y de Reyes Magos anticipados nos mandan, bien envueltas con lacito, 7000 plazas para recluir a seres humanos y 250 antidisturbios para controlarlos. Para que no se vayan a Europa a comer el turrón. Y es que, en Canarias, no es Europa ¿sabe? Mírese el bolsillo, no sea que tenga Dirham Marroquíes, ojo si va al Mercado de la Recova, igual está en el Central de Dakkar, o en su pasaporte pone, República del Camerún.

 

Es curioso, Autonomías (alguna, incluso, gobernadas por el PSOE) como Valencia, Navarra, Extremadura, País Vasco y Castilla y León, además del Ayuntamiento de Barcelona, han ofrecido plazas al Ministerio para ayudar a acoger a estos inmigrantes. Y no, mejor hacer un buen tapón migratorio y dejarlos aquí abajo, fuera de Europa, en Canarias.

 

Está claro que nuestro pobre timple no dio la nota y vientos de mala música soplan desde Madrid. Un año después, ya no nos vale que vengan 2 ministros por aquí otra vez, que otro (Marlaska) se vaya a llorar a Marruecos (ni le hicieron caso...) y otra a Bruselas a pedir ayuda. La pregunta ahora es la del “quid pro quo”, algo por algo. Porque entiendo que, a cambio de ser tapón, seremos compensados con mejores presupuestos, un trato diferencial o ayudas especiales. Igual han prometido algo al Gobierno de Canarias. Igual tienen algo que contarnos...que no sabemos.

 

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