Tres reyes

Por Francisco J. CHAVANEL
Los tres circunscripciones electorales “reyes” para Coalición Canaria son Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura. En esas tres islas se concentran el 66% de los representantes nacionalistas, esto es, 12 parlamentarios. Son su fortaleza cara a ese enfrentamiento a cara de perro en mayo 2019, donde los dos grandes bloques (derecha e izquierda) se disputan una mayoría prácticamente imposible de conseguir por la entrada de Ciudadanos, da igual si aplicamos proyecciones con la presente ley electoral como la que contempla la lista regional.
Nunca, como en esta edición, las cosas han estado tan complejas, nunca en los últimos 25 años CC lo ha tenido peor, nunca cuatro partidos políticos han hablado y repetido hasta la saciedad estar ante “un fin de ciclo” (PP, PSOE, NC y Podemos).
A esto se le añade el hecho de que, casualmente, hayamos entrado en terreno de “guerra sucia”. En menos de dos semanas, el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, ha resultado imputado a petición de la Fiscalía, por presunta prevaricación y falsedad documental, en una compra relativa a combustibles, carburantes, y catas de aguas. Coincidiendo con él, también a Pedro Sanginés se le ha abierto juicio oral por algo que estaba teóricamente “muerto”: la incautación de la desaladora del Club de Lanzarote. A pesar de que el empresario expresó su voluntad de retirar cualquier queja con el Cabildo, y que incluso la Fiscalía retiró su acusación, el juez determinó llevar a Sanginés al banquillo haciéndole caso a la acusación particular que ostenta Carlos Meca, cuya lugar en la vida, amén de representar con sus maneras insultantes a Podemos, es odiar al citado Sanginés.Sorprendente. Curioso. Muy casual.
El tercer apartado lo protagoniza Fernando Clavijo, candidato a la Presidencia por la isla de Tenerife. El caso Grúas es un “no caso”. No puede existir ni prevaricación ni malversación cuando la administración pública no ha perdido ni un solo euro, ni se ha producido ni daño ni dolo de ningún tipo. Es una estrategia alimentada por los mismos que pusieron en marcha el “caso Corredor” hace cuatro años, con JFLA a la cabeza. Supuestamente.
Los tres asuntos comentados son claramente administrativos. Tan administrativo como lo sucedido en la Residencia de Mayores de Agüimes, donde el entonces alcalde, Antonio Morales, decidió quedarse con el dinero de los sufrientes por la dependencia cuando las partidas eran finalistas y a nombre de personas concretas. Este posible fraude no ha pasado al plano penal. Razón: no estaba politizado.
Conclusión: CC no controla casi nada de lo que pasa en los tribunales. Son otros quienes los utilizan en su contra. Casualmente, claro. Tres islas, tres fortalezas, ahora tres debilidades para una jauría que pretende hacer cierto, como sea, el denominado “fin de ciclo”.