Los atuneros, al borde de la desaparición
- Lancelot Digital
La iniciativa del parlamentario lanzaroteño y presidente del Cabildo, Oswaldo Betancort, para intentar "salvar" al sector atunero artesanal de Lanzarote es tan loable como urgente. Ha instado al Gobierno de Canarias a implicarse y trasladar al Estado la necesidad de flexibilizar los requisitos de tripulación exigidos por Marina Mercante, adaptándolos a la realidad de la pesca artesanal de la isla. Sin embargo, el reto es enorme: las administraciones central y europea suelen aplicar normativas que no diferencian entre grandes flotas, como las vascas, y pequeñas embarcaciones como las canarias.
Betancort ha recordado que las exigencias del modelo de tripulaciones mínimas, impuesto en 2023, ignoran las peculiaridades de la flota artesanal canaria. Por ejemplo, no tiene sentido exigir un segundo patrón para guardias nocturnas cuando los atuneros de Lanzarote no faenan por las noches.
La propuesta presentada desde Lanzarote pide que los atuneros de hasta 24 metros de eslora puedan operar legalmente con solo dos titulados a bordo: un patrón polivalente y un jefe de máquinas. Este cambio daría una oportunidad real de supervivencia a las embarcaciones y al sector. No obstante, Aquilino Arrocha, patrón de la Cofradía de Pescadores de San Ginés, advierte que, si no se logra esta reforma, la pesca artesanal en la isla desaparecerá irremediablemente.
La situación actual es crítica. Los barcos que debían haber iniciado la temporada en marzo permanecen amarrados en los puertos de Lanzarote. La falta de personal, causada por un relevo generacional que no se produce, y una normativa que no contempla las especificidades de la pesca artesanal canaria —sostenible y respetuosa con el medio marino—, están llevando al sector al colapso.
En 1999, Lanzarote contaba con 21 atuneros en activo. Hoy, apenas quedan seis. Si no se actúa con rapidez, pronto no quedará ninguno.
Aunque las probabilidades de que la iniciativa de Betancort prospere son escasas, no debemos abandonar la esperanza. Es necesario que otros representantes, como el senador autonómico Pedro San Ginés y el senador insular Manuel Fajardo Palarea, se sumen a esta causa. El sector atunero de Lanzarote, y la tradición que representa, necesitan todos los apoyos posibles para evitar su desaparición.
