"Famara ya no es una playa local, es inviable que Teguise asuma su vigilancia completa"

Rita Hernández reconoce que el Ayuntamiento carece de medios para cubrir los cinco kilómetros de la playa

La teniente de alcaldía y concejala de Turismo, Playas, Urbanismo y Oficina Técnica del Ayuntamiento de Teguise, Rita Hernández, ha reclamado este jueves en los micrófonos de Lancelot Radio 90.2 FM que la seguridad de la playa de Famara pase a ser asumida por el Cabildo de Lanzarote o el Gobierno de Canarias, al considerar que el consistorio “no dispone de medios suficientes” para garantizar la vigilancia en una playa de más de cinco kilómetros de extensión.

“La playa de Famara ya no es una playa de un pueblo, se ha convertido en la playa insular de toda la isla. El Ayuntamiento de Teguise no tiene medios para hacerse cargo de una playa tan grande”, explicó Hernández durante su intervención en el programa Las voces de la mañana.

La responsable de Turismo y Playas subrayó que el municipio invierte más de 700.000 euros anuales en el servicio de socorrismo, cumpliendo con lo exigido por el plan de seguridad, pero reconoció que sería “inviable” mantener la cobertura total que dicta la normativa.

“Si la ley obliga a tener un vigilante cada doscientos o trescientos metros, imagínese en cinco kilómetros. Es imposible. Famara necesita una gestión insular”, añadió.

Hernández adelantó que el Ayuntamiento reforzará la señalización e información preventiva en la playa dentro del nuevo contrato de mástiles, banderas y cartelería, que incluirá a todo el litoral de Teguise.

 
Inversiones en playas

Hernández también anunció la adjudicación de las obras de reparación integral de los tres baños públicos de las playas de Costa Teguise, con una inversión de 180.000 euros.

“No se trata de un mantenimiento, sino de una reforma completa: prácticamente se tiran abajo por dentro y se hacen nuevos”, detalló.

Además, explicó que el municipio destinará otros 300.000 euros procedentes de una subvención del Gobierno de Canarias para instalar torretas de vigilancia, mástiles y nueva cartelería en las playas de Famara y Costa Teguise.

El plan contempla sustituir los actuales contenedores por instalaciones más sostenibles y resistentes, equipadas con energía solar, agua corriente y materiales adaptados al entorno.