Domingo, 14 Diciembre 2025
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Mientras el Cabildo asegura estar en la obligación de dar un trato digno a estas personas, una parte de la sociedad insular no está conforme con la situación

 

  • Lancelot Digital

 

No ha tardado en encenderse la controversia en Lanzarote tras confirmarse el traslado de los inmigrantes llegados a la isla en pateras a apartamentos y hoteles de la zona de Puerto del Carmen.

 

El Cabildo ha manifestado de forma oficial que ofrecerá toda posibilidad ocupacional que demande el Estado con el fin de dar albergue a los inmigrantes.

 

“El Estado tiene que garantizar que las personas migrantes tengan el trato y el recurso habitacional adecuado durante el tiempo que estén en nuestra isla y que, por tanto, el Cabildo se va a sumar a todas las propuestas habitacionales que sean necesarias para dar respuesta a la situación”, señalaba Alberto Aguiar, portavoz y Consejero de Cultura del Cabildo de Lanzarote.

 

Por contra, existe un clamor popular que se muestra contrario a esta medida. En Lanzarote, su máximo representante es el activista Bruno Perera, quien ha iniciado una huelga de hambre a las puertas del Cabildo para que se extradite a estos ciudadanos africanos.

 

 

 

“Reclamo que el Gobierno canario y la delegación del Gobierno expulse a todos los inmigrantes ilegales que han llegado y los que están llegando, y que desalojen a todos los que tenemos alojados en hoteles y apartamentos”, señalaba Perera. “Creo que no podemos dar alojamiento, alimento, ropa y dinero a los inmigrantes ilegales que tenemos en Canarias alojados en apartamentos y albergues hechos para ellos porque nuestro pueblo pasa hambre con la situación actual que estamos pasando. Si no hay para nosotros, no hay para dar a nadie”.

 

Estas declaraciones de Perera han encendido entre ayer y hoy las redes sociales de Lancelot, encontrando numerosos comentarios contrarios pero también otros muchos favorables a sus tesis.

 

 


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