Árboles, planchas y cables, todo lo que el viento se llevó

Las rachas de hasta 90 kilómetros por hora provocaron numerosos incidentes

Lanzarote estuvo en alerta naranja por la fuerza del viento durante toda la jornada del martes, en que la fuerza de este alcanzó hasta los 90 kilómetros por hora en algunos puntos de la isla.

Las consecuencias no se hicieron esperar. Tal y como se pudo ver en redes sociales, ya que los vídeos comenzaron a circular desde primera hora de la tarde, la fuerza del viento convirtió el mar en una auténtica arma de demolición. Localidades como Playa Honda sufrieron especialmente las consecuencias en su paseo marítimo. El viento también tumbó algunos módulos del Monumento al Campesino, tiró cables de telefonía y postes telefónicos.

Además, hizo que los Bomberos tuvieran que sujetar la planchas del revestimiento de la fachada de Ikea, que corrían riesgo de caer a la calzada. Las anclaron con cintas.

Acudieron también a Las Caletas ante la llamada de la Policía Local porque había un árbol a punto de caer. Al llegar comprobaron que eran dos árboles los que ya estaban en el suelo, y un tercero apoyado en el edificio de Canal Gestión con peligro de caída. Se cortó ese tercer árbol con una electro sierra y se dio por finalizado el servicio.