Asolan desaprueba la "drástica" confiscación de la desaladora, que "daña la imagen" de Montaña Roja
Espera que las medidas adoptadas "no tengan la intención de vedar al particular la posibilidad de recurrir al autoconsumo"
Lancelot Digital
La patronal turística de Lanzarote desaprueba las maneras utilizadas por el Cabildo de Lanzarote y el Consejo Insular de Aguas en la “apropiación” de la desaladora de Montaña Roja. A juicio de Asolan, “han dado, con premeditación, una imagen dañina”. “Basta que, antes de su actuación ya había sido convocada una rueda de prensa al efecto”, señala la patronal turística.
Asolan considera que “es indudable que el revuelo causado por la sorpresiva, tanto por lo drástico de las medidas adoptadas por el Consejo Insular de Agua, como por la forma en que han sido llevadas a cabo, no favorecen en nada para el logro de un clima de recuperación económica e incentivos a la inversión que mediante iniciativas legislativas de gran calado persigue el Gobierno Autonómico Canario y otras administraciones públicas en Lanzarote”.
En este sentido, Asolan recuerda que esta planta desaladora ,ahora confiscada, “se encuentra y abastece a la mayor urbanización turística y residencial en la isla de Lanzarote” y, por ello, muestra “su más absoluto rechazo a la gestión política de una medida que, en caso de ser necesaria, podría perfectamente haberse llevado a cabo de otra forma menos gravosa para la imagen de las instituciones de la isla y con las mínimas garantías que exige un estado de derecho para los particulares y empresas afectadas”.
“Es notorio, según ha trascendido en estos días, que en un Estado de Derecho están los procedimientos, y en la incautación de la desaladarora de Montaña Roja se ha ido a una vía que daña la imagen de la mayor urbanización turística de Lanzarote, sin atenerse a las mínimas normas legales”, añade la patronal turística de la isla.
Asolan apunta que aunque no sea su cometido posicionarse “en el fondo del asunto, en el ámbito de un conflicto como ha sido el tema de la recepción y negativa de la empresa pública Inalsa de abastecer al Plan Parcial de Montaña Roja, así como entrar a valorar el procedimiento llevado a cabo en términos jurídicos, al carecer de la orden por la que el presidente del Cabildo y del Consejo Insular de Aguas justifican tal drástica medida como una confiscación de una potabilizadora, sí que se puede manifestar -sin ningún género de dudas- que nos encontramos ante el uso una medida excepcional utilizada en un momento concreto, esto es, durante la tramitación del Plan Hidrológico Insular”.
Así, Asolan considera, tal y como ha puesto de manifiesto durante la tramitación del futuro Plan Hidrológico Insular, que “la administración, dentro de su competencia reguladora del servicio de aguas, sí debe ser estricta en cuanto a los criterios de calidad y de vigilancia de las plantas de desalación públicas o privadas que estén en funcionamiento, con el fin de evitar riesgos sobre las personas o sobre el entorno, ya sea por una deficiente producción o una irresponsable gestión del proceso”.
Sin embaro, cree que no debe “eliminar un recurso del sector empresarial de la isla para salvar una de las grandes dificultades con las que se ha enfrentado para desarrollar nuestra tan preciada industria turística, como es y ha sido que el sector turístico tuvo que apostar e invertir para garantizar el autoabastecimiento del agua en una época donde las instituciones públicas no hicieron, ni pudieron, garantizar este abastecimiento”.
Desde Asolan se espera que las medidas adoptadas con respecto a Club Lanzarote “no tenga que ver con la intención de vedar al particular la posibilidad de recurrir al autoconsumo”.