Astrid versus Yonathan

Nueva polémica en el PP de Lanzarote. La presidenta critica la retirada de la cruz católica de la Plaza de las Palmas en Arrecife

Todavía no se ha disipado la polémica por la ausencia del alcalde de Arrecife, Yonathan de León, en el Congreso del PP nacional del pasado fin de semana, una decisión que no se entendió en la dirección insular, cuando surge un nuevo enfrentamiento en el seno del PP de Lanzarote.

La presidenta del PP insular, Astrid Pérez, ha condenado, a través de un comunicado la retirada de la cruz de piedra de la plaza de Las Palmas frente a la Iglesia de San Ginés en la capital de Lanzarote.

El proyecto que se ejecuta para la renovación de la denominada plaza de la iglesia fue aprobado en su momento por el Cabildo Insular y por el Ayuntamiento capitalino, ambas administraciones gobernadas por el pacto CC-PP.

La nota de prensa de Astrid Pérez, alineada con las críticas que en tal sentido ha emitido VOX en Arrecife, no deja en buen lugar la actuación de su alcalde en relación con este proyecto.

Todavía parece que no se ha cerrado la herida tras la decisión de la presidenta del PP de cesar a Jacobo Medina como vicepresidente del Cabildo y como secretario general del partido en la isla, una decisión que fue cuestionada por el actual alcalde de Arrecife, alineado con su compañero Jacobo.

“Ataque a nuestras raíces cristianas y culturales”

La presidenta del Partido Popular de Lanzarote y La Graciosa, Astrid Pérez, ha expresado este viernes su indignación ante el derribo de la cruz de la plaza de Las Palmas, en Arrecife. Un suceso que, institucionalmente, se ha amparado en el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, pero que, lejos de ser sospechosa de ser calificada como "franquista", es un símbolo cristiano que forma parte del diseño original, señala la nota de prensa.

Cabe señalar que su retirada ha conmocionado también a gran parte de la población lanzaroteña. "Como presidenta del Partido Popular de Lanzarote y La Graciosa lamento profundamente la retirada de la cruz de esta histórica plaza de nuestra capital".  Pérez ha señalado que este hecho es el resultado de "una decisión tomada sin consenso ni respeto por la historia local". La presidenta de los populares ha expresado que este hecho es "un ataque injustificado a nuestras raíces cristianas y culturales".

La cruz, presente en este entorno desde los años 50, no contenía ninguna referencia franquista ni vulneraba la Ley de Memoria Histórica. Además, formaba parte del diseño original de la plaza realizado por el artista César Manrique y ha sido, durante décadas, un símbolo de identidad para los arrecifeños.

"Me preocupa que se intente ideologizar un elemento religioso con el único fin de eliminarlo", ha añadido Astrid Pérez. "Lanzarote ha sido siempre ejemplo de convivencia, y no podemos permitir decisiones que buscan dividir y enfrentar".

Por parte de los populares de Lanzarote se exige respeto a nuestras tradiciones y la inmediata reposición de una cruz que no era franquista, sino que era de todos los vecinos de Arrecife.

La ley de memoria democrática está avalada por el Supremo

El Tribunal Supremo ya avaló en una sentencia retirar las cruces que incluyan a los fallecidos de un solo bando de la Guerra Civil en aplicación de la Ley de Memoria Histórica ya que “supone exaltación de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura”.

Esta sentencia se refiere a la retirada de una cruz situada en una plaza pública de Callosa del Segura (Alicante), frente a la iglesia, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica. La sentencia desestima el recurso por la Plataforma Ciudadana en defensa de la Cruz frente al acuerdo del Ayuntamiento de la localidad, de 26 de enero de 2017, que rechazó una propuesta del portavoz municipal del PP para conservar el monumento.

La cruz de la Plaza de Las Palmas fue financiada por la obra social de La Falange para homenajear a los caídos del bando nacional, como así figuraba también en la placa que existía en la misma plaza, en la que se conmemoraba la visita del dictador Francisco Franco a Arrecife en los años 50 del pasado siglo para inaugurar el Hospital Insular.