Ciudadanos propone soterrar los contenedores de la basura en Arrecife

El pleno se compromete a estudiar una propuesta que “ya fracasó” porque originaba muchos problemas

El pleno del Ayuntamiento de Arrecife celebrado ayer martes, día 23 de octubre, se comprometió estudiar la moción presentada por Ciudadano de soterrar los contenedores de la basura al menos en las zonas con mayor afluencia como la avenida marítima. Esa moción ha creado cierta polémica porque es regresar al pasado cuando ya la idea fracasó.

Al respecto, el concejal de Cs en la corporación capitalina, Iñigo Inchausti, ha señalado que “son muchos los vecinos y turistas que se quejan por la presencia de malos olores, suciedad y manchas en el suelo por la caída de basura en descomposición”, sobre todo en lugres como el Puente de las Bolas, las cercanías del Club Náutico o en la confluencia de la Avenida Marítima con la calle Real.

No obstante, es “un problema del que no es ajeno a ninguno de los barrios del municipio”, ya que “afecta a todos”, por lo que se hace necesario que “el equipo de gobierno (PSOE y PIL) tome medidas efectivas que acaben con la suciedad y los malos olores en la capital”.

Por ello, y porque “el objetivo final de esta moción de Cs es mejorar la imagen de la ciudad y evitar que las zonas de gran afluencia se llenen de basura”, Ciudadanos ha logrado que el gobierno local se comprometa “a analizar si el soterramiento de contenedores es la mejor vía para resolver este problema, o bien a buscar otras opciones que permitan acabar con esta problemática”.

Más allá de las buenas intenciones que puede tener esta moción del soterramiento de los contenedores de la ciudad, los expertos consultados señalan que esa idea ya fracasó en Arrecife y en la mayor parte de las grandes ciudades de este país donde se puso en práctica. En Arrecife, en la época de la alcaldesa de Isabel Déniz, cuando pertenecía al PIL, y gobernaba la capital en un pacto con el PSOE, se soterraron los contendedores en varios puntos de la ciudad, sobre todo en el frente marino.

Lo cierto es que la idea no salió como se esperaba. Los mecanismos de subida y bajada de los contenedores soterrados se rompían, la basura que caían en el fondo de los habitáculos subterráneos no se recogía adecuadamente, eso atraían cucarachas e inclusos ratas. Por si fuera poco, complicaba mucho el recorrido de los camiones de recogida, atrasaba el servicio y lo encarecía. Todos esos aspectos negativos provocó que desde hace años (en la época del socialista Enrique Pérez Parrila como alcalde), se anularan y se dejaran fuera de servicio esas instalaciones.

Fuentes de diferentes partidos políticos señalaron que el soterramiento de contenedores no tiene mucho sentido y que lo que habría que hacer es “exigir un mejor funcionamiento, de la recogida de residuos sólidos de la ciudad. Exigir al ayuntamiento campañas de concienciación de los deberes de los ciudadanos y en las llamadas zonas centrales de la ciudad obligar a tirar la basura en un horario determinado y reducido para evitar la acumulación. Hay ya muchas formas para evitar la mala imagen y los malos olores que el soterrar que es una idea del pasado”