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Cuatro hombres y un sentimiento

 

Pasan los años y Ruymán Fernández, Alejandro Martín, Raúl Fernández y Ayoze Pérez siguen siendo los pilares del club 

 

  • Guillermo Uruñuela
  • Cedida
  •  

    La UD Lanzarote está viviendo una de las mejores temporadas en su historia en Tercera División. Con el curso ya muy avanzado, y pese al tropiezo del pasado fin de semana en Fuerteventura, los rojillos siguen de cerca la estela del líder, el US Yaiza. -un liderato que por cierto han ocupado hasta el domingo-.

     

    El equipo se ha reforzado con mucho jugadores foráneos los últimos años. Algunos de ellos dejaron un buen nivel a su paso por el Avendaño Porrúa, otros sin embargo se esfumaron o tuvieron un papel testimonial. 

     

    Esta temporada los nuevos fichajes, en muchos casos, llegaron desde Argentina pero también se repescaron futbolistas conejeros como Álex Cruz, Dani González y se han incorporado de la tierra jóvenes talentos como Guize, Adrián Machín o Javi Martín -estos últimos ya firmaron su contrato el curso anterior-.

     

    Con todo ello, cuatro nombres, sólo cuatro destacan sobre el resto. Cada uno con sus particularidades, su edad, su rol en el equipo y sus obligaciones laborales. Ayoze Pérez, Raúl Fernández, Ruymán Fernández y Alejandro Martín representan a la perfección el sentimiento rojillo que tan importante es para entender la historia de la UD Lanzarote.

     

    Los dos guardametas se han convertido, alternando las titularidades, en un muro de seguridad para la UD. Ellos siempre están. Da igual que la temporada sea buena o mala. Su nota media es sobresaliente todos los cursos y cuando el equipo ha carburado, han ayudado a sumar puntos para estar arriba y cuando el equipo ha estado mal, han permitido salvar categorías como hace dos temporadas con Mateo García.

     

    Raúl Fernández, es la sobriedad. El central que no se equivoca. El del golpeo en largo y la serenidad en momentos complejos. Por otro lado le imprime a sus compañeros carácter porque el tiñosero, dentro de esta aparente tranquilidad, es un tipo con un espíritu ganador.

     

    El cuarto hombre, Ayoze Pérez, es de los que se sitúa al lado del escudo. El más veterano de todos. El capitán. Al que todos respetan y reconocen en el club. Pérez siempre ha sido un jugador esencial en la historia UD Lanzarote, junto a otros nombres propios ya retirados, pero el sigue ahí a sus 37 primaveras.

     

    Con el paso de los años poco a poco todos ellos irán perdiendo nivel y se aproximará su retirada pero lo que está claro es que mientras estos cuatro futbolistas se sigan vistiendo de corto, ese sentimiento de la UD Lanzarote que por momentos parece que se diluye, seguirá manteniéndose intacto. 

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