Detenido el agresor que intentó abusar de una joven en Arrecife
El hombre se coló en el domicilio de la víctima por la ventana, le hizo tocamientos y le produjo lesiones con un cuchillo
- Lancelot Digital
El presunto agresor de un delito de agresión sexual a una joven de 19 años ya ha sido detenido.
Los hechos se producían en la tarde noche del martes 23 de noviembre en la calle Manolo Millares, tras un aviso de la Sala Operativa de la Comisaría de Arrecife que informaba de una reyerta con arma blanca.
En su desplazamiento al lugar de los hechos los agentes interceptan en la calle Manolo Millares a un hombre, de nacionalidad marroquí, y 29 años, que tenía la cara ensangrentada. La Policía procedió entonces a un cacheo superficial de seguridad, y a solicitar su traslado en ambulancia al Hospital José Molina Orosa. Los agentes acompañan al hombre en la ambulancia dada la actitud agresiva que demuestra, a pesar de las lesiones.
En la misma calle Manolo Millares la Policía Nacional se encontraba atendiendo por su parte a una joven de 19 años que había manifestado ser víctima de una agresión por un hombre que entró por la ventana de su domicilio, y que tras cogerla del cuello procedió a tocarle los pechos y el culo, y que le produjo unas lesiones con un cuchillo en la pierna izquierda.
La descripción que realizó la joven a los agentes sobre el presunto agresor, un varón con pantalón militar y una camiseta blanca, coincidía con la persona que había sido interceptada por los efectivos de la Policía Local en la misma calle Manolo Millares y que había sido trasladado al Hospital General.
Una vez traslada al Hospital, la víctima coincide con los agentes de la Policía Local que custodiaban al joven marroquí al que auxiliaron en la calle Manolo Millares y ésta les manifiesta que el varón marroquí era el autor de las agresiones que sufrió.
Es en ese momento cuando los agentes de la Policía Local proceden a la detención del presunto agresor, y tras ser atendido en el Hospital lo trasladan a los calabozos, no sin que el hombre muestre a la puerta de las dependencias policiales una resistencia agresiva, escupiendo a los agentes y profiriendo frases como “Ala Akbar”, Alá es grande, según figura en el atestado policial.