El Consorcio del Agua analizará la posibilidad de que los vecinos del municipio de Yaiza paguen menos a Inalsa
Se encargará un estudio jurídico para determinar la viabilidad de la rebaja
Lancelot Digital
El Ayuntamiento de Yaiza ha propuesto a los miembros del Consorcio Insular del Agua -que se reunieron el lunes en una asamblea extraordinaria en la que se aprobó un aumento en la tasa de saneamiento- aplicar un descuento en la factura del agua de Inalsa a los vecinos del municipio, como medida compensatoria por la mala calidad que continúa teniendo el suministro que reciben, una situación que se registra desde hace al menos tres años, ya que la situación no ha sido aún solventada, pese a los reiterados anuncios que se hicieron desde el grupo de gobierno del Cabildo en la segunda mitad de la pasada Legislatura. El Consistorio sureño ya había realizado este pedido en ocasiones anteriores, pero sin respuesta positiva, aunque ahora habría predisposición para aplicar esa rebaja.
El concejal de Aguas del Ayuntamiento, Juan Lorenzo Tavío, que defendió la propuesta ante el presidente del Cabildo y los alcaldes de la isla, se ha mostrado “satisfecho” por la respuesta de los socios de Inalsa, que en principio “acogieron positivamente la iniciativa, a falta de un estudio jurídico que determine su viabilidad”, según señalan desde el Consistorio. El presidente de la primera corporación insular, Pedro San Ginés, “se ha comprometido a encargar junto a Inalsa dicho estudio para actuar en consecuencia“, agregan desde el Consistorio.
La administración local sureña espera que considerando el análisis que ahora se va efectuar sobre esa solicitud de rebaja, “pueda hacerse realidad a corto plazo”, quedando por concretar el porcentaje de descuento y su tiempo de aplicación. Desde el Ayuntamiento señalan que “la calidad del suministro ha mejorado un poco con el cambio de tuberías”, aunque sigue sin ser óptima, y se mantiene la “prohibición” por parte de Salud Pública para su consumo y la recomendación de abstenerse de lavar los alimentos con agua del grifo y de usarla para cocinar.
Así, aparte de la factura de Inalsa, los residentes en el sur “tienen que pagar el sobrecoste que supone comprar semanalmente garrafas de agua envasada para beber y cocinar”, agregan desde el consistorio, además de otros gastos producto de la mala calidad del agua, “como pueden ser la limpieza frecuente de aljibes y los daños que ocasiona el óxido en electrodomésticos, entre ellos, lavadoras y termos”, por lo que el Ayuntamiento entiende que la aplicación del descuento “sería una decisión muy justa”.