Domingo, 14 Diciembre 2025
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Un error inicial provocó una serie de equívocos que terminaron por invalidarlo tras una jornada de celebración

 

  • Lancelot Digital
 

 

La noticia de la anulación por incompetencia del juicio de la incautación de la planta desaladora de Montaña Rojas ha dado mucho que hablar en los ambientes jurídicos de la isla de Lanzarote.

 

Sobre todo, porque hay pocos casos conocidos en España en que se haya suspendido un juicio tras una jornada de celebración.

 

Varios abogados penalistas de la isla sí recuerdan algunos casos de juicios que se han anulado en la fase de las cuestiones previas, pero nunca, o muy pocas veces, cuando ya ha comenzado.

 

A la pregunta de quién o quiénes son los responsables de lo ocurrido en el juicio de la incautación, donde se juzgaba al ex presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés, por un presunto delito de prevaricación, la mayoría de los juristas creen que todos en general tienen bastante culpa.

 

Desde la Fiscalía por no haber advertido que era la Audiencia Provincial la competente, la jueza por no haber caído y los propios abogados defensores que debieron exponer la ilegalidad en el apartado de cuestiones previas.

 

Otros juristas, en cambio, consideran que el juez instructor fue el que indujo al error al resto ya que debió enviar el caso directamente en el periodo de calificación a la Audiencia Provincial al pedir la acusación más de 10 años de pena de inhabilitación a los imputados.

 

De todas maneras, todos coinciden en que todo este lío ha sido un bochorno donde la imagen de la Justicia no queda precisamente bien y, gracias a Dios que finalmente la jueza, “in extremis”, dio marcha atrás no agrandando el error inicial.


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