Los carteles de "se vende", "se alquila" o "se traspasa" lo dicen todo

Cristóbal Sánchez, propietario de varios restaurantes en Lanzarote, denuncia la situación insostenible que sufre el sector

Está a punto de cumplirse un año desde que dio comienzo el primer estado de alarma por la pandemia. Probablemente, los 365 días más difíciles que se recuerdan en la historia reciente de nuestro país. Entre los más perjudicados por las medidas adoptadas por el Gobierno, central, primero, y autónomico, después, se encuentran las personas que viven del turismo. Sobre todo en Canarias. 

Cristóbal Sánchez, empresario del sector de la restauración en Lanzarote, denuncia en la Entrevista del Día de Lancelot Televisión la situación insostenible que está viviendo uno de los principales cimientos de la economía canaria.

"Desde hace muchísimos años que en las avenidas turísticas no se veían carteles de 'se vende', 'se alquila' o 'se traspasa'. Eso lo dice todo", señala el restaurador, al mismo tiempo que lamenta que "la gente lo esté pasando mal" y no entiende que las políticas no ayuden a los negocios, sino que los aprieten. "Llevamos un año desembolsando y sin ingresos, no cabe en la cabeza", manifiesta. 

Asimismo, el propietario de La Cascada, entre otros establecimientos, defiende que "para estar así, mejor que nos cierren", pero sin tener que asumir los costes. En este sentido, vuelve a señalar a los responsables políticos, que, a su juicio, no toman decisiones "adecuadas". Sánchez no entiende que, por ejemplo, solo se puedan sentar dos personas en una mesa, aunque sean convivientes. "Con mi mujer y mis hijos, que vivimos bajo el mismo techo, no puedo comer en un restaurante", menciona sobre una de las polémicas medidas que entró en vigor con la fase 4.