Domingo, 14 Diciembre 2025
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El Ayuntamiento busca soluciones a la viabilidad de la instalación pública, y la oposición considera que son parches

  • Lancelot Digital

 

El Grupo de gobierno del ayuntamiento de tías aprobaba ayer en sesión plenaria la última posible solución a un problema como es el de abrir la piscina municipal después de quince años sin poder hacerlo. El alcalde José Juan Cruz y sus compañeros daban luz verde a despiezar la actividad deportiva de la piscina que será de gestión pública y por el otro lado la concesión a una empresa privada de la cafetería y otros servicios. “A diferencia de otros modelos planteados con anterioridad, se propone una gestión individualizada de la piscina municipal, separándola de otras áreas deportivas cercanas o establecimientos como el destinado a cafetería, que en el pasado fueron ofertados conjuntamente en procesos de contratos de concesión de servicios sin resultado. Ahora, desde una perspectiva distinta, planteamos la gestión de las actividades acuáticas en piscina de manera independiente, separándola del resto de elementos que serán igualmente aprovechables por parte de la administración mediante otro tipo de procesos administrativos. Planteamos con la actividad de servicio público de la piscina la licitación de contratos de servicio para monitores y socorrismo, asumiendo en este caso el riesgo operacional del servicio público, pero con todas las garantías de sostenibilidad financiera que se han estudiado y que operan en la memoria de este expediente, que incluso arrojan superávit y sin dependencia a ninguna otra concesión de las que se prevén”.

El PP considera que esta solución solo es un parcheo a un problema mucho mayor. Francisco Aparicio, portavoz del partido en el Ayuntamiento de Tías, señalaba que “Han inflado ustedes ahora mismo lo que son los ingresos para intentar conseguir que el interventor les haga un informe favorable. Van a entrar en un bucle de sacar muchísimas licitaciones para acabar en un parche”.

El concejal de Coalición Canaria, Amado Vizcaíno, cuestionó las cifras de usuarios que acudirán a la piscina y considera que será un milagro convertir lo que han sido continúas pérdidas en ganancias por valor de 200.000 euros. “Este al final va a ser el milagro de la piscina de Tías. De costarnos doscientos mil euros al año, vamos a tener un superávit de doscientos mil euros al año. Sin duda, se parece al milagro de Benjamín Perdomo cuando estuvo al frente de los centros turísticos, que llegó a decir que con los centros cerrados ganaba más dinero que con los centros abiertos”.

Lo dicho. Tías busca una solución a un problema en el que la viabilidad económica de esta instalación socio deportiva siempre ha estado en entredicho.


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