Fiscalía pide que el presunto asesino de Romina comparezca a diario en el Juzgado

Se alega que existe un alto riesgo de fuga, mayor aún desde que Raúl Díaz se trasladó a Madrid
- Lancelot Digital
Un alto riesgo de fuga, ese es el motivo que ha alegado la Fiscalía para solicitar a la Audiencia de Las Palmas que obligue a personarse a diario ante un juzgado al presunto asesino de la joven paraguaya Romina Celeste Núñez, su marido Raúl D.C., que se encuentra en libertad desde el pasado viernes. Creen que las posibilidades de que se de a la fuga, son todavía mayores desde que ha traslado su domicilio de Lanzarote a Madrid, tal y como publica Diario de Avisos.
La sección segunda de la Audiencia ya había ordenado a Raúl D.C. comparecer cada lunes en los juzgados, pero el fiscal delegado de Violencia sobre la Mujer de Las Palmas, Jesús Javier Lomba, ha recurrido su decisión para exigir una medida más severa, que fuerce al procesado presentarse a diario ante la Justicia, incluso cuando se fije ya la fecha de celebración de su juicio.
El Ministerio Fiscal insiste así en una medida que ya sugirió, sin éxito, el pasado 9 de enero, cuatro días antes de que Raúl D.C. saliera de la cárcel de Tahíche (Lanzarote) por cumplir el tiempo máximo de prisión preventiva a la espera de juicio (cuatro años).
En su recurso, la Fiscalía alega que el auto de puesta en libertad no explica en su fundamentación jurídica las razones por las cuales no se aceptó su petición, por lo que considera que se vulnera el derecho a la tutela judicial efectiva.
Añade que “de manera sucinta se alude exclusivamente a la razón del transcurso del tiempo y plazo máximo en prisión provisional, si bien, no realiza ningún pronunciamiento sobre las circunstancias que sobre las que la Fiscalía advierte que existe un riesgo alto de fuga, que, “objetivamente, resulta altamente probable”, pues ya ha trasladado su domicilio a la Comunidad de Madrid y dispone de medios económicos.
Lomba remarca que se trata de un presunto autor de delitos de homicidio/asesinato, maltrato habitual, lesiones en el ámbito familiar, simulación de delito y profanación de cadáver.