La alcaldesa de Arrecife pide más tiempo para reflotar un Ayuntamiento "hundido"

Asegura que la "deuda ronda los 47 millones de euros más lo que se debe a los proveedores"

El nuevo grupo de Gobierno del Ayuntamiento de Arrecife tiene que aprobar un plan económico financiero porque tiene más deudas que ingresos y esto obliga a actuar. Es decir, el Consistorio tendrá que responder a las directrices del Ministerio de Hacienda o el órgano competente de la Comunidad Autónoma en su política de pagos.

Así que, "íbamos a aprobar un presupuesto para el ejercicio 2020 pero, bueno... Estamos muy condicionados a esta situación financiera. Por lo tanto, podríamos decir de alguna manera para entenderlo bien que el próximo año será un Ayuntamiento intervenido".

A la deuda de Ginory de 20 millones de euros de principal más los intereses y otras sentencias que ronda los 47 millones de euros, hay que sumarle la deuda con proveedores que no se ha cuantificado en su totalidad pero que, según la alcaldesa, es "brutal".

"Y digo brutal porque es tan grande que los servicios de Intervención están elaborando un informe que me imagino que finalizará sobre el mes de octubre en el que daremos cumplimiento y cuenta de cuál es la deuda total que hay que añadirle a esta deuda de todos los pagos a proveedores. Hay facturas muy antiguas y está siendo, según el departamento de Intervención, muy laborioso elaborar ese listado definitivo de deudas a proveedores de este Ayuntamiento", dice Ástrid Pérez.

En otras palabras "ésta es la realidad, no cubrimos los objetivos de estabilidad presupuestaria y mucho me temo que muchísimo menos las reglas de gasto. Yo creo que esto es lo más duro de plantear. Y, sobre todo, eso. El resumen es que este Ayuntamiento explotó ya hace mucho tiempo, no se adoptaron las medidas que se tenían que haber adoptado desde hace muchos años y esto ya no da para más".

Para superar este bache, Ástrid Pérez pone de receta "dedicarle a esto 16 y 17 horas al día". Y aún así, este jueves ha dicho, 40 días después de llegar al Gobierno, que le será complicado cumplir con sus promesas electorales a medio plazo.

"Yo voy a decir unas palabras que son del interventor, espero que no se ofenda, cuando le dije si el barco está hundido, me dijo sí y solo le queda la banderita del mástil que dice que aquí hay algo. Nosotros no vamos a poder reflotar un Ayuntamiento que lleva 10 años hundido. No lo vamos a poder hacer ni en un mes ni en dos ni en tres meses ni en un año".

Aunque Pérez argumenta que trabajará con ilusión y ahínco para salir del bache, se lamenta de tener departamentos clave como la Oficina Técnica infradotados de personal o completamente desmantelados pese a que el Consistorio cuenta con 400 trabajadores en nómina y ante la necesidad de que realicen funciones que no les corresponde por categoría, una consecuencia directa ha sido que "nos están lloviendo sentencias de empleados públicos que han ganado sentencias por realizar trabajos de superior categoría porque, claro, evidentemente no hay personal ni técnico ni administrativo en el Ayuntamiento que pueda suplir las demandas que genera una ciudad que tiene 61.000 habitantes". "Yo creo que no tenemos una estructura organizativa de una ciudad con 61.000 habitantes. Cuando hemos llegado hemos preguntado por las bolsas de empleo y están todas caducadas", añade la alcaldesa.

También ha anunciado que va a contratar a un jefe de recursos humanos tras el verano, externalizará la relación de puestos de trabajo para reorganizar internamente el Consistorio.