La Policía Científica acusa de mentir al secretario del Caso Unión
El jefe policial declaró que este funcionario faltó a la verdad al asegurar que un segundo agente firmó el acta de devolución de las grabaciones, tal y como informa Canarias 7
Texto y foto: Lancelot Digital
El jefe de la Policía Científica de la Policía Nacional de Arrecife acusó al secretario del Caso Unión de mentir al asegurar que el acta de devolución al Juzgado de los soportes digitales de las grabaciones que la juez mandó analizar se firmó por un segundo agente. Así lo recogía este fin de semana el periódico regional Canarias 7.
Este agente explicó a la jueza Silvia Muñoz y la secretaria de refuerzo que el citado funcionario, José Ramón Vera Machín, no dijo la verdad en sus diligencias sobre el caso. Según manifestó el mando policial el pasado 21 de febrero y tal y como recoge Canarias 7, “no es cierta” la versión del secretario cuando éste afirma por escrito que el 7 de enero de 2014 que un segundo agente firmó el acta de devolución de los soportes digitales. Estas grabaciones se habían entregado por orden de la jueza, para que se analizara su autenticidad y su integridad, es decir, si habían sido manipuladas.
El jefe de la Policía Científica asegura que esta acta sólo fue rubricada por él mismo y por el propio secretario, pero no por otro agente. Sin embargo, en el documento de devolución de los cds y dvds del Juzgado de ese día 7 de enero aparece la firma de una tercera persona que, al parecer y según versión del jefe de la Científica y del propio agente que le acompañó, no corresponde a ninguno de ellos y desconocen por lo tanto quién pudo firmar.
Esto se suma a la gran cantidad de informaciones aparecidas sobre las supuestas irregularidades que se cometieron a lo largo de la instrucción, que fueron denunciadas por un informe de la jueza Lucía Barrancos y que se ha encargado de desgranar este periódico regional. Entre estas anormalidades se encontrarían la supuesta manipulación de las grabaciones efectuadas por Carlos Espino a varios empresarios o la inexistencia de las grabadoras usadas.