Lanzarote estudia crear un centro de acogida de gatos

El objetivo es evitar que los felinos ferales, depredadores por naturaleza, acaben con otras especies de la isla 

La representante de Ecologistas en Acción, Elena Solís, cree que la solución para disminuir y proteger las colonias de gatos asilvestrados en los espacios naturales con una alta tasa de biodiversidad no es la captura, esterilización y devolución a esos espacios. La solución para la que fuera consejera de Medioambiente del Cabildo es la creación de un gran Centro de Acogida de gatos en Lanzarote como ya se hace en Tenerife y otras islas.

Elena Solís cree que es erróneo, por muy buena que sea la voluntad de las administraciones públicas, el programa que desarrollan en la isla de La Graciosa y Famara de devolver a dichos espacios y a sus colonias a esos gatos. Cree que es un malgasto del dinero público que no resuelve el problema. “El dinero público debe ir a la construcción o habilitación de un sitio en la isla donde se pueda hacer un centro. Cuando yo era consejera de Medio Ambiente se buscaron sitios, se habló incluso de La Granja. Esto, yo sé, que es algo que el actual consejero está considerando y le invitamos a seguir trabajando en este centro”.

Solís responde a la alcaldesa de Teguise cuando dice que hay una contradicción entre la Ley de Bienestar Animal y las leyes de protección medioambientales. “No hay contradicción. La Ley de responsabilidad animal es cierto que obliga a los ayuntamientos, y les permite compartir esa responsabilidad con el Cabildo, y debemos decir que en este caso el Cabildo ha sido responsable y ha cogido el toro por los cuernos, pero a lo mejor lo que se está haciendo no es necesariamente lo mejor”.

Para Solís el estudio en el que se apoya el Cabildo no es el adecuado, ya sus propios técnicos en su época como consejera de Medioambiente lo rechazaron. “Sabemos que quien hizo este estudio es un veterinario de toxicología animal. Es decir no tiene ninguna cualificación sobre la biodiversidad y la fauna salvaje y esto es un fallo enorme. Este informes debería haber sido avalado por los informes técnicos de Bienestar Animal y de Medio Ambiente”.

La realidad es que la proliferación de gatos en Lanzarote, sobre todo en zonas turísticas, pero también en zonas sensibles de la isla como los espacios naturales, es un problema. Sobre todo, para la fauna autóctona.