Domingo, 14 Diciembre 2025
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Sólo en algunas zonas turísticas, sobre todo por desinformación y confusión, se vieron a turistas paseando con aparente normalidad
 
  • Lancelot Digital
 
 

El primer día de limitaciones a la libre circulación, entre otras medidas contenidas en el Real Decreto aprobado ayer por un Consejo de Ministros extraordinario que declaraba en España el estado de alarma, está llegando a su fin en Lanzarote sin incidentes reseñables, más allá de algunos residentes despistados o turistas desinformados a los que las autoridades han tenido que llamar la atención por transitar por la vía pública sin motivos que fueran más allá del ocio, el placer o el deporte. 

 

A primera hora, un ciudadano era sorprendido por la Guardia Civil mientras caminaba por la Avenida Marítima de Playa Honda luego de haberse dado su baño rutinario. El agente explicó al varón la normativa vigente por el estado de alarma, que impide, entre otras actividades, bañarse en las playas. 

 

 
 
Situaciones similares se han vivido en otros puntos costeros de Lanzarote como, por ejemplo, Matagorda. En este caso, es un socorrista el que informa del alto número de turistas que se encuentran tanto en la playa como paseando por la avenida. El joven, que no tiene potestad para expulsar a los turistas del lugar, aseguraba haberse puesto en contacto con las autoridades, quienes en ese momento no podían personarse por estar desbordados
 
 
 
 
Asimismo, en Arrecife, en el Parque Ramírez Cerdá, un coche de la Policía Nacional tuvo que advertir a un grupo de transeúntes de que estaba prohibido pasear. 
 
 
 
 
Sin embargo, conforme pasaban las horas la población ha ido interiorizando las medidas del Real Decreto, sobre todo las relativas a las limitaciones de circulación. Además, la totalidad de los bares, cafeterías y restaurantes han permanecido cerrados durante todo el día, sólo abriendo algunos supermercados y farmacias de guardia, tal como marca la norma. Dicho esto, cabe destacar las altas multas económicas a las que se exponen aquellos que incumplan la ley, pudiendo aplicarse, incluso, penas de cárcel. 
 
 
 
Las autoridades han confirmado su satisfacción con este primer día de estado de alarma por la respuesta solidaria de todos los lanzaroteños frente a una crisis sanitaria que, para erradicarse lo antes posible, requiere de que todos actuemos de manera responsable
 


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