Los destrozos en el embarcadero de La Santa impiden la entrada y salida de los barcos
El oleaje también afectó al sur de la isla, donde arrastró las mesas y sillas de la terraza de un bar situado en El Golfo
Texto: A.R.P.Vídeo: Lancelot Televisión
Todavía no se saben con exactitud la cuantía de los daños que produjeron las fuertes olas en el embarcadero de La Santa pero lo que es cierto es que las piedras que éstas desprendieron no dejan operar a los barcos con normalidad.
“Sobre todo en la parte de fuera, donde puede haber piedras grandes que impiden la entrada y salida con normalidad de los barcos; además, dentro del muelle también hay bastantes, por lo menos 16”, explica el miembro de la Asociación de Pescadores de La Santa, Cristóbal Oliveros.
Dos embarcaciones serán las más afectadas debido a su pequeño tamaño: “Nos quedan cuatro barcos arriba que están pendientes para ir a otros puertos pero dos no tienen autonomía suficiente para hacerlo y son los que más van a sufrir”, explica Oliveros.
Por lo tanto, esas familias no podrán vivir durante un tiempo de la mar: “Hay familias que no van poder ganarse el sustento del día a día, van a tener que esperar a que se quiten las piedras del muelle para hacerlo”.
El coste de los daños superará las decenas de miles de euros y aunque todavía no se han valorado oficialmente, las instituciones de la isla y los pescadores de La Santa ya han comenzado a movilizarse para pedir ayuda.
“Lo más dañado ha sido la maquinilla de varar los barcos, que se quemó y que costará unos 30.000 euros; además, el oleaje rompió la puerta del surtidor de gasoil y cinco carros de los barcos que están fuera”, relata Oliveros.
También el sur de la isla las olas dejaban su particular huella. En El Golfo, el agua llegaba con fuerza al litoral y se llevaba las sillas y mesas de la terraza del Bar Torano. La Policía local de Yaiza acordonaba la zona por motivos de seguridad mientras los curiosos turistas fotografiaban con admiración la majestuosa bravura del océano.