Cabrera dice que malinterpretaron sus palabras
El consejero afirma que "en ningún momento" intentó mofarse o faltar al respeto a los comerciantes. "Lo que dije fue un lamento", asegura
Lancelot Digital
El consejero de Comercio del Cabildo, Manuel Cabrera, ha salido hoy al paso del duro comunicado enviado por los comerciantes del centro de Arrecife para dejar claro que "en ningún momento" intentó "mofarse o faltarles al respeto" con sus declaraciones, las cuales cree que se malinterpretaron. "No puedo retirar lo que he dicho. Yo soy dueño de mis palabras y por tanto responsables de ellas, pero no soy dueño de lo que dicen que dije. Lo que dije es que lamentablemente en el periodo que duran unas obras van a caer comercios. ¿Y eso es mofarse? Si lo que estoy diciendo es un lamento", ha afirmado en Lancelot esRadio, donde ha insistido en que "no es una cuestión de insensibilidad, sino de realidad".
Cabrera ha asegurado que la "primera empatía que tienen" los comerciantes "y la primera persona que se siente responsable de todo lo que está ocurriendo" es él." A partir de ahí pongan lazos negros, denuncien, me parece muy bien. Están en su derecho de hacer la campaña que quieran. Yo lo que sí entiendo, lamentando muchísimo que durante el periodo que dura una obra pueda caer un comerciante, dos o tres, que se puede alargar el proceso de una obra y esta obra ahora mismo sólo tiene 20 días de retraso. Aun así sabemos que vamos a ir a más y yo soy el primero en lamentarlo y en lamentar que cualquier comerciante se vea abocado a cerrar porque la obra le esté perjudicando, pero también es verdad que una obra tiene un interés general y se hace para la mejora de la ciudad de Arrecife", ha apuntado el consejero de Comercio, que cree que "Arrecife necesita muchas inversiones para dejar de ser el patito feo".
En cualquier caso, Manuel Cabrera ha asegurado que el Ayuntamiento y el Cabildo están "haciendo todo lo posible legalmente para intentar ayudar y que se cumplan los plazos". "Pero si la empresa no los cumple, nos vemos abocados a una situación que lamentamos y que somos los primeros que no deseamos", ha señalado. Al respecto, el consejero de Comercio ha explicado que el Cabildo ha puesto a disposición, por orden del presidente, 100.000 euros a disposición para mejora de esos comercios, para cartelería, escaparates, mobiliario, al ser "lo único" que se les permite desde los servicios jurídicos. "Y por parte del Ayuntamiento me consta que se está estudiando y se va a hacer factible seguramente la reducción de todas las tasas en un 50% o en su totalidad durante los meses que han pasado las obras", ha añadido.
Sin embargo, Manuel Cabrera es consciente de que con eso "no se ayuda a vivir al comerciante que lo esté pasando mal", pero afirma que no pueden dar ayudas económicas desde la institución "porque la ley lo impide". "El que haya tenido que caer, lamentablemente muerto está, y eso es la realidad y lo que a mí me entristece, pero por decir eso no me estoy mofando de los comerciantes. A mí me gusta ser claro y no llevar esperanzas bandidas y falsas. Yo por decir esto no creo que sea merecedor de una nota por parte de esa supuesta asociación de comerciantes, donde se me tacha poco menos de ser una persona insensible, de que me importan un pimiento los comerciantes y de que soy casi un corrupto por ser de un partido político. Yo la verdad es que soy una persona honrada, que he venido a la política con toda la ilusión para intentar hacer las cosas con rectitud", ha apuntado.
El consejero de Comercio ha insistido en que el Cabildo ha hecho la inversión "por el bien de la ciudad". Eso sí, Cabrera ha querido dejar claro que aunque la institución "es absolutamente responsable de la obra porque es quien contrata y el promotor, los periodos de ejecución, las fechas elegidas y el proyecto es del Ayuntamiento de Arrecife". "El Cabildo ha venido a hacer realidad un proyecto del Ayuntamiento de Arrecife. El Ayuntamiento no podía y el Cabildo lo ha hecho realidad", ha añadido. No obstante, Cabrera reconoce que la obra lleva "un retraso, que no se han cumplico los plazos y que se está perjudicando a comerciantes y vecinos más de lo deseable". "Esa es lamentablemente la realidad que tengo y frente a la que no puedo hacer mucho, porque una vez firmado un contrato es difícilmente movible la situación", ha afirmado.
Según ha señalado, la empresa ha pedido ahora una prórroga, "que se está estudiando y que sería de dos o tres meses". "La empresa nos promete todos los días en las múltiples reuniones que tenía que va a intentar dentro de todas sus posibilidades acabar y que está intentando recuperar a marchas forzadas el tiempo perdido", ha concluido.