Regresa la Wine Run que el PSOE eliminó
El consejero de Medioambiente del Cabildo, Samuel Martín, anunció además que se pondrá en marcha el llamado "pacto por el Paisaje"
La famosa carrera lúdica-deportiva Wine Run volverá a celebrarse este verano en Lanzarote. De esta manera el Cabildo, que preside Oswaldo Betancort, recupera una carrera que la anterior administración de la socialista Dolores Corujo eliminó aplicando su política revisionista de la gestión realizada por el expresidente del Cabildo, Pedro San Ginés. El consejero de Medioambiente del Cabildo, Samuel Martín, confirmó que en junio esperaba poner en marcha la Wine-Run 2024, tras cuatro años de suspensión, primero por la pandemia y posteriormente por decisión política. “Esta prueba incluía algo muy importante, ya que no solo era deportiva, sino que potenciaba la cultural del vino y la cultura del paisaje. Es algo muy interesante, y puede que cueste arrancar, pero es importante hacerlo y recuperar también a toda esa gente que venía de fuera a disfrutar de la prueba”.
Martín también anunció que la Casa de Los Arroyos se va a restaurar, seguirá siendo sede de la oficina del Consejo de la Reserva de la Biosfera, y se abrirá al público para ser visitada. “Abrir la Casa de los Arroyos a quienes nos visitan y a los vecinos de Lanzarote”.
También el consejero nacionalista del Cabildo habló del llamado Pacto del Paisaje. “Lanzarote se ha caracterizado siempre por tener una idiosincrasia única que no tienen otros territorios y queremos recuperar la marca Lanzarote a través de un Pacto por el paisaje, donde estamos todos los partidos políticos que formamos parte del Cabildo, los Ayuntamientos, los colectivos sociales y territoriales de toda la sociedad insular”.
En relación con Famara señaló que para este verano se va a señalizar con unos bolardos la parte derecha del camino que va desde El Rincón desde la zona de Los Noruegos para impedir que se aparque en la zona de las dunas, yendo hacia el Macizo de Famara. “Hemos rescatado un proyecto y estamos ya con los permisos de Costas. No se prohibirá el paso a los vehículos, pero se limitará”.
Cree Martín que Famara como espacio natural tiene un problema con los coches que hay que atajar con sentido común, apostando por crear una especie de órgano gestor que pueda ayudar al Ayuntamiento a reducir el impacto negativo sobre el paisaje de los vehículos que allí aparcan.
