Domingo, 14 Diciembre 2025
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Los vecinos y comerciantes de la zona critican que gobierne quién gobierne solo se ponen parches a este problema

 

  • Lancelot Digital

 

Los vecinos y comerciantes de la zona centro de Arrecife tienen todavía muy frescas las escenas que dejó tras de sí, hace apenas unos meses, la borrasca Filomena, especialmente los de las calles Portugal o La Plazuela.

 

Por ello, y ante la alerta por lluvias localmente fuertes declaradas por la Aemet, en la mañana de este viernes los sacos de arena son el más rústico, pero también el más demandado método contras las aguas que podrían inundar locales y bajos o garajes.

 

Los comerciantes optaban por poner maderas, chapas y los sacos para evitar la entrada de la lluvia en sus locales. A muchos ya les pasó con las pasadas lluvias.

 

“Así nos entra menos agua, pero sigue entrando”, explican.

 

 

Para los comerciantes, la solución es bastante clara: llevar el agua de lluvia al mar.

 

“Lo ideal sería poner unas canaletas que desvíen el agua hasta la marea”, sugieren. “Estamos a cincuenta metros, y el agua sigue quedando aquí estancada en La Plazuela, y no solo el agua de lluvia, también aguas fecales”.

 

En el centro de Arrecife se tiene la percepción que desde la clase política poco se ha hecho para terminar con este problema.

 

“Lo de los sacos es un parche que se pone siempre. Los partidos políticos critican lo de los sacos cuando están en la oposición, pero todos, igualmente, los traen”, aseguran.

 

En pleno corazón de la capital de la isla, queda claro que, cuando llueve fuerte, solo les queda encomendarse a los sacos de arenas y, si no, en últimas instancias, a las plegarias al cielo.

 

 


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