Domingo, 14 Diciembre 2025
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

Las islas cuentan con la quinta tasa más alta de jóvenes que ni estudian ni trabajan

 

  • Lancelot Digital
 

 

Ni estudian, ni trabajan, los llamados ninis, al parecer, son cada vez más abundantes en Canarias. De hecho, las islas tienen la quinta tasa más alta de Ninis del país, detrás de Ceuta y Melilla, Baleares y Andalucía. Canarias cuenta con un 15,8% de jóvenes que ni estudian ni trabajan, un dato más acusado en hombres (16,8%) que en mujeres (15,9%)

 

La media nacional de ninis de esta franja de edad se situaba en 2022 en el 13,9%, según los datos publicados por el Ministerio de Educación y Formación Profesional. Por su parte, la tasa de abandono escolar temprano se situaba  el año pasado en el 11,7%, un 2,2% por debajo de la media nacional que está en el 16,3%.

 

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) recomienda identificar los colegios vulnerables y tomar medidas que fomenten la inclusión, la equidad y el bienestar en las escuelas para reducir el abandono escolar temprano, así como quitar el horario intensivo centrado en las mañanas implantando una jornada de mañana y tarde. Estas recomendaciones han quedado plasmadas en el informe 'Propuestas para un Plan de Acción para reducir el Abandono Escolar Temprano en España' elaborado por la OCDE, en colaboración con el Ministerio de Educación y Formación Profesional y la Dirección General de Apoyo a la Reforma Estructural de la Comisión Europea.

 

Una de las medidas que plantea el informe es dar "apoyo adicional a los alumnos vulnerables y a sus familias, la creación de grupos de aprendizaje de diferentes tamaños, la oferta de clases adicionales (por ejemplo, apoyo con los deberes o clases de refuerzo) o la ampliación del tiempo de aprendizaje con sistemas flexibles de jornada completa".

 

 

 

Apuntan que apostar por un horario de mañana y de tarde, tendría un impacto aún más favorable para los menores en riesgo de exclusión social. De cara a implantar este sistema, destacan que habría que invertir en subvenciones para la alimentación y las infraestructuras escolares y remunerar adecuadamente al personal de los centros, entre otras cuestiones. Asimismo, el índice de vulnerabilidad escolar propuesto y la correspondiente financiación a través de subvenciones podrían utilizarse para promover y apoyar a los centros en el proceso de transición para ampliar el tiempo de aprendizaje de los alumnos.

 

 

 

Entre otras recomendaciones, también se añade la necesidad de adaptar los recursos existentes en los centros para atender las necesidades individuales de aprendizaje, reducir las tasas de repetición de curso, limitar la segregación escolar, realizar intervenciones tempranas, reforzar la orientación escolar y profesional, ampliar el acceso a una educación infantil de calidad y fortalecer la colaboración entre los centros, los progenitores y las comunidades locales.


PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
×