PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

Coca-Cola cumple 14 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU

La empresa avanza en sus objetivos de sostenibilidad y apuesta por una recuperación verde

 

  • Lancelot Digital
  •  

     

    La inesperada aparición del coronavirus ha sido como un tsunami que lo está cambiando todo, colocándonos ante un futuro incierto. Pero, pese a la infinidad de consecuencias negativas que está provocando, también representa una oportunidad para que la recuperación tras la crisis permita avanzar hacia un nuevo modelo socioeconómico que sea climáticamente neutral, resiliente, sostenible e inclusivo.

     

    Coca-Cola está entre las voces que defienden esta transformación -forma parte de la nueva Alianza Europea para una Recuperación Verde, promovida por la UE- y desde hace años realiza una gestión responsable de su negocio para ser parte de la solución hacia un mundo mejor. Es más, con ella contribuye a 14 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, directa o indirectamente.

     

    En este sentido, en 2017 se marcó unos ambiciosos objetivos en materia de sostenibilidad para Europa Occidental con su estrategia Avanzamos. Con unas metas muy concretas fijadas para 2025, este plan pivota sobre seis ejes principales: bebidas, envases, sociedad, agua, clima y cadena de suministro. Desde entonces, Coca-Cola comparte cada año los avances conseguidos y los retos que aún le quedan por superar con la publicación de su informe de sostenibilidad.

     

    Los consumidores demandan cada vez más una mayor variedad de bebidas, entre ellas las bajas en o sin calorías, y en línea con estos deseos, entre 2010 y 2019 Coca-Cola en España redujo un 35% el contenido total de azúcares por litro de producto.

     

    Además, el año pasado Coca-Cola en España volvió a superar su objetivo de que, al menos, el 50% de sus ventas correspondan a bebidas bajas en o sin calorías. No obstante, mantiene intacto su compromiso a seguir reformulando sus productos, innovando en ingredientes dulces naturales, no calóricos, y presentando nuevos lanzamientos -en 2019 fueron 19- que puedan suponer opciones realmente novedosas.

     

    La creciente contaminación de los océanos es uno de los grandes problemas medioambientales a los que nos enfrentamos. En este sentido, el 99,6% de los envases de Coca-Cola en España son reciclables o reutilizables, lo que significa que, si se recogen y se hace una correcta gestión de los mismos, podrán tener nuevas vidas.

     

    A la vista está que eso no siempre pasa, por eso Coca-Cola se ha comprometido a recoger y reciclar el equivalente a los envases que comercialice cada año. Fruto de este compromiso, en 2018 nació Mares Circulares, un proyecto de colaboración para limpiar costas y mares, generar una cultura del reciclaje y promover la economía circular que, en 2019, permitió recuperar, entre otros residuos, cinco toneladas de envases de plástico.

     

    Además, la compañía introduce criterios ambientales en el diseño de sus envases para que, por ejemplo, se necesiten menos materias primas para fabricarlos. Así, las botellas de plástico ya están fabricadas con un 25% de material reciclado, y el objetivo es elevar ese porcentaje al 50% en 2022, tres años antes de lo previsto.

     

    Para aumentar estas cifras de material reciclado e incorporar nuevas mejoras, en 2019 Coca-Cola invirtió 180 millones de euros en proyectos de ecoinnovación en Europa Occidental. Como resultado de estos esfuerzos, a finales de 2019 presentó la primera botella apta para uso alimentario elaborada con plástico reciclado procedente de basura marina, algo que no se había podido hacer hasta ahora.

    La apuesta por la diversidad y la inclusión está en el ADN de Coca-Cola, tanto dentro como fuera de la compañía. A nivel interno, Coca-Cola en España lleva años poniendo en marcha una serie de medidas para impulsar el talento de las mujeres y lograr que tengan las mismas oportunidades. Esto ha posibilitado que, en 2019, en Coca-Cola Iberia el 49% de los puestos directivos estuvieran ocupados por mujeres.

     

    Asimismo, la compañía sigue poniendo especial atención en mejorar la capacitación personal y profesional de dos de los colectivos que más apoyo necesitan en la sociedad: el de las mujeres y los jóvenes. De este modo, desde 2012, su proyecto GIRA Jóvenes ha impactado en más de 5.000 chicos y chicas, mientras que, desde 2016, casi 14.000 mujeres de pueblos y ciudades de toda España han podido mejorar su empleabilidad o hacer realidad sus ideas de negocio tras su paso por la iniciativa GIRA Mujeres.

     

    El agua es el ingrediente principal de los productos de Coca-Cola, pero también un recurso vital para el planeta. Para asegurar su uso eficiente, el 100% de las plantas de Coca-Cola en España cuentan con planes de protección de las fuentes de agua y, entre 2010 y 2019, la compañía logró reducir un 15,54% el consumo de agua en los procesos de fabricación de las bebidas.

     

    También siguió desarrollando programas de reabastecimiento de agua en zonas con estrés hídrico, como parte de su compromiso de devolver a la naturaleza el equivalente al 100% del agua contenida en sus bebidas. Así, en 2019, repuso al medio ambiente 3.782 millones de litros, un 129% del agua incluida en las bebidas que comercializó en España, lo que supone 15 puntos más que en 2018.

     

     

    El cambio climático es el reto ambiental más grave que encara hoy la Humanidad, y Coca-Cola forma parte de los esfuerzos globales para hacerle frente. Así, el 100% de la electricidad que Coca-Cola en España utiliza tiene su origen en fuentes renovables. Además, desde 2010 ha logrado reducir un 42,05% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en sus operaciones comerciales centrales y un 30,8% las emisiones en su cadena de valor.

     

    También está detrás de las citas más importantes contra el cambio climático, como la pasada Cumbre del Clima celebrada en Madrid, y ha puesto en marcha iniciativas como Hostelería #PorElClima, dentro de la Comunidad #PorElClima, para apoyar al sector en su transición hacia una economía baja en carbono.

     

    Pero todos estos esfuerzos quedarían incompletos si Coca-Cola no se asegurara una cadena de suministro igualmente respetuosa con el medio ambiente y la sociedad. Por eso, el 100% de sus proveedores están adheridos al Código de Conducta para Proveedores de la compañía.

     

    También trabaja para que el 100% de los principales ingredientes agrícolas y materias primas sean de origen sostenible. Así, en 2019, el 88% del azúcar y el 100% de la pulpa y el papel que utilizó Coca-Cola en España se obtuvieron de proveedores que cumplieron con sus Principios de Agricultura Sostenible.

     

    Dentro de estos esfuerzos para que sus fuentes de suministro sean sostenibles, destaca el proyecto Cítricos Sostenibles, que busca que los productores de cítricos en España, ya sean o no proveedores de Coca-Cola, hagan un uso más eficiente del agua en el riego y empleen menos fertilizantes, especialmente en zonas con gran estrés hídrico.

     

    Como muestra el informe de sostenibilidad 2019, Coca-Cola siguió consolidando su compromiso con el negocio, las personas y el planeta. Es más, en 2019 redefinió su propósito global, Refresh the world. Make a difference (Refrescar al mundo. Marcar la diferencia), donde reconoce la importancia de la sostenibilidad y le otorga un papel fundamental.

     

     

    En un momento dominado por la incertidumbre provocada por el coronavirus, "ahora más que nunca, necesitamos empresas que hacen de la sostenibilidad su propósito", señalan los directores de Coca-Cola Iberia y Coca-Cola European Partners Iberia en el documento. "Ese es el compromiso de Coca-Cola -prosiguen- y lo seguirá siendo en el futuro: seguiremos incorporando estos principios de actuación a cada una de las acciones que realicemos".