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¡2014!, sabor “agridulce”

Por Antonio Coll

 

 

El año 2014, en breve, nos dejará para siempre. Hay muchas razones para catalogar los 12 meses transcurridos como “agridulces”. En política, es cierto, que no se ha avanzado lo suficiente para darle siquiera un aprobado, a determinados dirigentes. Patologías severas del pasado, han vuelto a incidir y han alejado las expectativas de una mejoría sintomática, en todos los proyectos previstos en la isla de Lanzarote. En este aspecto, destaco los planes de ordenamientos territoriales, urbanos y especiales. Si bien, algunos ayuntamientos ya cuentan con sus ansiados planes urbanos, -Yaiza, ya en vigor, (un sobresaliente para Gladys Acuña), Tinajo y Teguise-, otros aún no han soltado amarras porque los vientos no le son favorables. Intereses de toda índole están prevaleciendo para frenar la aprobación del PIOT; el Plan Especial de La Geria y el Plan Supletorio Urbano de Arrecife. Tres herramientas estratégicas que son vitales para avanzar y encauzar la isla por el sendero del progreso. Documentos que ofrecen un ordenamiento sostenible y garantías jurídicas. Me consta la perseverancia de algunos destacados políticos de aprobarlos, en esta legislatura que termina en mayo/15, siempre y cuando superen las “piedras” que, de forma intencionada, se han puesto en el camino. La gestión del Presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, a pesar de su peculiar forma de gobernar, hay que valorarla positivamente, por su valentía y perseverancia, en la aprobación inicial del PIOT y el Plan Especial de la Geria. El problema está en las posturas ambiguas y beligerantes de algunos partidos, que está impidiendo el beneplácito de los citados documentos.

 

El comportamiento de la dirección del PSOE, con su política de “tapadillo”, es desconcertante, incluso, en contra de sus propios consejeros, en el grupo de gobierno insular. Y hay muchas malas razones para pensar que esas actitudes no tienen el aval para defender los intereses generales de la isla. Un amplio espectro de la sociedad lanzaroteña conoce, perfectamente, desde hace años, como se conspira en esta isla y como se usa la retórica y la demagogia, para escenificar posturas que, en el fondo, solo buscan intereses particulares, sin importarles para nada, los estragos que provocan a la misma sociedad y al interés general. Lo lamentable es que desde 2007, venimos padeciendo los mismos tejemanejes, sin que nadie haya podido frenarlo de raíz. Dilatar más esta involución es seguir judicializando todos los proyectos y acciones, dañando la economía y el propio bienestar de los pobladores de la isla. Y no está Lanzarote para perder más tiempo. Hay mucha gente con necesidades que solo aspiran a un empleo para poder subsistir, en esta época convulsa y de disparates financieros. Ya en mi entrega anterior, titulada “Las trampas de un poder en la sombra” ofrezco similares claves en referencia a la política reinante.

 

Con el “politiqueo diario” no se gobierna

 

El año 2014 se nos va y solo nos ha dejado un sabor “agridulce”. Las formaciones políticas en general, han seguido realizando las mismas prácticas de antaño, sin enterarse de los profundos cambios que está demandando la sociedad. Prioridades como la creación de empleo no ha tenido la más mínima consideración en la clase política actual. No han querido ver la cruda realidad y han seguido con sus reglas de juegos tradicionales, sin importarles la situación adversa de las miles de familias que no saben cómo llegar a fin de mes, solo para comer. Que temen por el futuro de sus hijos, porque las mismas familias, no saben del “politiqueo” diario de sus gobernantes, al que eligieron para “gobernar” y dar soluciones a los problemas reales. Porque el lanzaroteño decente no comprende cómo una isla, que reúne todas las condiciones para vivir con bienestar, se encuentre anclada y no ofrezca oportunidades de empleo. En este aspecto, Lanzarote fue la única isla de Canarias, donde subió el paro el mes de noviembre. Y esto es inconcebible. Es obvio que si no se facilitan las condiciones para impulsar el mercado laboral, dinamizando la economía, será difícil crear empleo estable. Si las inversiones públicas y privadas no se ejecutan, es por frenarlas, precisamente, la no aprobación de los nuevos planes de ordenamiento territorial y urbano, entre otras circunstancias. Seguir con este panorama desolador, a primera vista, la isla se encontrará en la misma encrucijada. Es decir paralizada. Solo habrá trabajo en los juzgados. Y ya se sabe el “modus operandi” de la Justicia en este país. Además, la labor de los jueces no es dirigir la isla, como es obvio.

 

2015, año electoral

 

Me gustaría ser optimista, pero mi acusado pragmatismo, es un obstáculo para percibir que los problemas reales de la isla se vayan a resolver a corto o medio plazo.

 

Se avecina un nuevo año con el componente excepcional de ser un año electoral. Escucharemos muchas promesas, nuevas ideas, pero no sabemos si se implementarán, después de los comicios.


La irrupción de Podemos, tiene, a mi modo de ver, un componente positivo, y está sirviendo para despertar al “gallinero político”, muy entretenido en cuestiones internas, en practicar el clientelismo entre ellos y olvidándose de los reales problemas de la sociedad. Así se está reflejando, de forma nítida, en los sondeos de opinión.


Se han perdido cientos de oportunidades. Se han perdido o estancados proyectos de gran envergadura, pero aun así, no dejaré de soñar porque como dijo el editor de Forbes: “Cuando dejas de soñar dejas de vivir”. El problema de nuestros gobernantes, quizás, es que “sueñan” mucho, pero no actúan. Este es el dilema. Por eso la isla padece de insomnio permanente.


A pesar de todo, brindaremos por el nuevo año 2015. No sirve de nada rendirse y tirar la toalla… Brindaremos por el 2015 para que la isla se convierta, con talento y sabiduría, en un lugar decente para vivir.

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